La fotógrafa Gerda Taro, fallecida en la Guerra Civil, dará nombre a una rotonda en El Escorial
La rotonda de Los Escoriales llevará el nombre de la fotógrafa alemana Gerda Taro (Gerta Pohorylle), fallecida en El Escorial el 26 de julio de 1937 tras sufrir un accidente en la Guerra Civil durante el repliegue del ejército republicano en la Batalla de Brunete. Pareja de Endre Ernö Friedmann, juntos fotografiaban bajo el pseudónimo de Robert Capa, siendo difícil determinar qué imágenes son de cada uno.
Así se acordó en el Pleno celebrado el jueves a propuesta del equipo de Gobierno de PSOE y Unidas El Escorial, contando con el respaldo de la edil de Ciudadanos, mientras que PP y Vox votaron en contra.
«Hacer justicia con las mujeres»
La portavoz del Ejecutivo y primera teniente de alcalde, Tamara Ontoria, señaló que de esta manera se pretendía “visibilizar la historia de mujeres que tienen vinculación con nuestro municipio”, recordando que Gerda Taro falleció en 1937 en el llamado Hospital Inglés, situado en el edificio de los Sagrados Corazones (actual Casa de Ejercicios San José). Está considerada, indicó Ontoria, la primera fotoperiodista de guerra, además de “la primera fallecida en campo de batalla”. “Una mujer pionera, libre y valiente”, añadió, en tanto que desde el PSOE el edil -Oscar Muro subrayó con medidas como esta se “hace justicia con las mujeres”. Por su parte, el alcalde, Cristian Martín, manifestó que Gerda Taro encarna los valores de “feminismo, paz y igualdad”, concluyendo que fue “una mujer adelantada a su época”.
Frente a esta propuesta, el PP, a través de su portavoz, Ignacio Parra, pidió que se quedara sobre la mesa, señalando que este tipo de cuestiones relacionadas con el callejero han de ser consensuadas con todos los grupos. Además, aseguró que “la única vinculación con El Escorial es que falleció aquí”.
«Sectarismo político»
En este punto incidió igualmente el portavoz de Vox, Emigdio López, señalando que la relación de Gerda Taro con El Escorial era “meramente accidental”. “La trajeron aquí porque era el hospital más cercano. Pero más allá de eso, no hay nada que la vincule”. “Mira que hay historia en El Escorial y resulta que ustedes tienen que ir a la Guerra Civil; tienen que superarlo”, enfatizó, para acabar diciendo que la propuesta era “puro sectarismo político”.
En respuesta a estas críticas, Demetrio Garrido (Unidas El Escorial) señaló que “en cuanto a la vinculación, a lo mejor no es mucha, pero digánme que vinculación tiene Colón con Madrid y tiene una plaza”, mientras Tamara Ontoria rechazó que se hablase de “sectarismo”, insistiendo en que la única intención es “visibilizar a la mujer”.
Fallecida en el Hospital Inglés de El Escorial
Hasta no hace mucho, tomando como fuente el libro “Gerda Taro, Fotoreporterin” de la investigadora alemana Irme Schaber (ISBN 978-3894454661), se había indicado erróneamente como lugar de su fallecimiento el “hospital El Goloso de El Escorial”. Sin embargo, gracias a las investigaciones de la revista FV FV (Foto-Vídeo Actualidad, la revista decana de la prensa impresa fotográfica en España), se pudo establecer recientemente que murió en el hospital número II de El Escorial, conocido como hospital inglés, que se encontraba en el seminario San José de los Sagrados Corazones de esta localidad, situado precisamente en las inmediaciones de la rotonda de Los Escoriales que a partir de ahora llevará su nombre.
El edificio original, erigido en los años 20, fue posteriormente demolido para dar paso a una construcción moderna a finales de los años 60. Actualmente, el nuevo edificio es una casa para ejercicios espirituales de esta congregación. Se encuentra situado en el número 12 de la avenida de los Reyes Católicos de El Escorial.
Durante los primeros meses de la Guerra Civil funcionó como hospital improvisado y en la primavera de 1937, como preparación a lo que sería después la ofensiva de Brunete, se instaló allí el hospital de la 35ª División Internacional del Ejército Popular de la República, a cuyo mando se encontraba el general Walter (Karol Wacław Świerczewski).
La revista FV publicó documentos, mapas y una foto inédita del edificio del seminario funcionando como hospital de guerra. Tras llegar en estado grave como consecuencia de un accidente en el repliegue del ejército republicano en Brunete, ya que el coche en el que viajaba fue arrollado por un carro de combate, Taro fue operada en El Escorial por el cirujano neozelandés Jolly y atendida por enfermeras como Irene Goldin. Sin embargo, no pudo superar las heridas y falleció en la madrugada del 26 de julio de 1937, apenas seis días antes de cumplir 27 años.