El CUC Villalba no descifra al Tres Cantos de David Muñoz (0-0)

El filial de Nano Rivas tuvo que conformarse con el empate en el Jaime Mata, en un partido de gran intensidad y pocas ocasiones de gol.

El CUC Villalba no pasó del empate sin goles en el Jaime Mata ante el Tres Cantos de David Muñoz, cuya propuesta, sin delantero fijo y sólo tres defensas, le discutió el balón y le cortó el caudal ofensivo hacia Marc de Castro, reducido a una mera declaración de intenciones, con sólo dos disparos con marchamo de gol, uno de Fran Gómez y otro de David, reaparecido en el once para erigirse en el mejor del equipo. El portero tricantino le sacó al 7 la mejor jugada del partido, un contragolpe que el centrocampista burgalés culminó con un trallazo a la salida de un quiebro que se colaba por el ángulo.

Esa acción, más la buena mano de Marc en el remate de la primera parte de Fran, fue todo el repertorio rematador de un Villalba demasiado retórico con la pelota, y casi obligado de forma permanente a vigilar la movilidad de los peloteros locales, cuya disposición resultó de lo más novedoso para cumplir con el objetivo de robar la pelota al filial atlético. El Tres Cantos descolgó arriba a creativos como Merchán o Febre, evitó fijar un punta de referencia dejando fuera a Aitor Lora, el goleador de El Chopo, y se organizó en el medio en torno al toque de Simal y el trabajo estajanovista de Ortega, uno de los destacados.

Con ese plan, y aun sin precisión en los pases, el cuadro local aguantó la presión villalbina, por momentos asfixiante, y mantuvo el control en las bandas, donde Nano Rivas trasladó a Adnane a la izquierda, dio la derecha a Castellanos y relegó al banquillo a Diego Messoussi. A esa tarea contribuyó el equilibrio en los duelos, donde a menudo el Villalba hace diferencias, y otro trabajo inconmensurable de Collado, que tras dejar su sello en Galapagar, acabó adueñándose del carril izquierdo tras ejercer de hombre para todo, incluidas sus apariciones como delantero.           

El Tres Cantos aprieta

Tras el descanso, el CUC Villalba fue jugando las bazas sucesivas de Messoussi y Abraham Nóbrega, relegado una vez más a la suplencia en favor de Javi Alonso, pero el extremo se ofuscó en un par de buenas internadas, y al ariete no le llegó ni un balón potable. Entre tanto, el Tres Cantos ejecutó una segunda parte del plan que pudo darle el partido, cuando Collado cogió con autoridad su banda, y Aitor Lora salió para subir la línea de presión, sustituyendo al nuevo refuerzo cedido por el Sanse, un Ian que pasó de puntillas por el partido. Como ante el Carabanchel, el Villalba perdió parte del control en la segunda mitad y se vio en varias fases obligado a achicar centros laterales, saques de esquina y algunas llegadas de calidad por el medio, sobre todo gestadas por Febre y Simal. Fue en esa fase intermedia de la segunda parte cuando más sufrió el Villalba sin el balón, pero la respuesta de su última línea, donde sobresalieron Raúl Girona y Aimar, éste en su primera titularidad ante la ausencia de Adrián Corral, estuvo a la altura del envite local.

El empate final acabó repartiendo los puntos y dio justicia a un resultado que a ninguno de los dos le valió, con el Tres Cantos aún lejos del playoff, y el CUC Villalba viendo volar al Alcalá 15 puntos por encima y acechado en la quinta posición. Su siguiente compromiso ante el Leganés B, este domingo a las 11:30 horas en la Ciudad Deportiva, será una prueba de fuego para aguantar ese puesto de fase de ascenso.                

Send this to a friend