Lourdes Cuesta, nueva presidenta de la Cofradía de San Blas de Villalba Pueblo: “Estoy ilusionada, pero es un año muy difícil”
Ante la complicada situación epidemiológica en Collado Villalba, donde la Comunidad de Madrid ha decretado el cierre perimetral de todo el municipio por el coronavirus, el Ayuntamiento de Collado Villalba ha decidido suspender todas las celebraciones programadas en colaboración con la Cofradía de San Blas para festejar la fiesta de su patrón, a excepción de la tradicional misa. La eucaristía tendrá lugar el miércoles 3 de febrero, a las 12:00 h., con aforo limitado y siguiendo los protocolos de seguridad establecidos por las autoridades sanitarias.
Lourdes Cuesta, nueva presidenta
La pandemia también ha interferido en el quehacer de la Cofradía de San Blas de Collado Villalba. El 15 de marzo, el día después de decretarse el estado de alarma, estaba prevista la asamblea donde Lourdes Cuesta iba a ser nombrada presidenta. Esta ratificación se tuvo que retrasar hasta el 13 de diciembre, cuando Cuesta, edil de Educación en la anterior legislatura fue nombrada primera presidenta de la Cofradía de San Blas, la tercera persona al frente de esta entidad tras Marcelo Rodríguez Ayuso, ‘El Titi’, y Pedro Martínez Balandín, ‘Peri’.
“Presenté mi candidatura, la única que había y se aceptó. Me lancé con mi Junta Directiva (Valentín Molinero, vicepresidente; Orfelino Benavides, secretario, que repite en el cargo; Yolanda Palacios, tesorera; y como vocales Antonia de Miguel Hernández, también en la anterior Junta; Abel de la Plaza, Enrique Gil, Juan José González Tejada, David Grande, que estaba anteriormente; José Jaramillo Jaramillo, uno de los socios fundadores; Trinidad Recio y David Rodríguez Lozano, hijo de ‘El Titi’). No he querido romper con nada, mi idea es siempre unir y mantener; aquí cabe todo el mundo. Estoy ilusionada, pero es un año muy difícil. Me lo pensé mucho, pero creo que lo puedo sacar adelante”, cuenta Lourdes Cuesta en la sede de la Cofradía, un local municipal junto a la biblioteca Sancho Panza, en Villalba Pueblo.
El patrón más antiguo
“San Blas es el patrón secular más antiguo de Villalba, más que San Antonio, que es más conocido porque sus fiestas son más abiertas porque son en verano, se celebran los festejos taurinos, viene la feria. Las celebraciones en honor a San Blas datan de los siglos XII y XIII cuando Collado Villalba pertenecía a la casa Cobarrubios dentro de Segovia”, recuerda.
Entre las funciones de la Cofradía están “mantener las tradiciones del municipio y rescatar las que están aparcadas, divulgarlas ante la sociedad y hacer partícipes a todos los vecinos y visitantes para dar a conocer lo que tenemos como el rondón, una jota segoviana”. A pesar de que ha habido periodos de tiempo donde ha decaído, nunca se ha dejado de celebrar la festividad de San Blas el 3 de febrero con una misa, una chocolatada en el salón El Capricho donde acuden los niños de los colegios San Antonio y El Enebral, una comida de hermandad y el baile en este mismo recinto. “Villalba ha crecido y a la gente que llega hay que enseñarla estas tradiciones. Antes la fiesta la organizaban los casados a su costa. Yo recuerdo a mi padre haciéndolo. Luego la vida cambia y no todos pueden soportar esos gastos y se quedó un poco dormida hasta que se creó la Cofradía. Ahora cuenta con la subvención del Ayuntamiento”. Este año la pandemia ha obligado a reducirlo a la misa.
San Sebastián, San Pedro…
“También se ha recuperado San Sebastián, el 20 de enero, aunque este año no se ha podido celebrar por la Covid-19. Recuerdo que hace más de 40 años se hacía una hoguera, donde se quemaban cosas, y los jóvenes saltaban las ascuas en la plaza del Ayuntamiento; iban con cencerros por todo el municipio. También se celebra el Miércoles de Ceniza y el entierro de la Sardina, pero ya se ha notificado a los socios que no lo podemos hacer, así que lo próximo es el Lunes de Pascua, cuando las familias celebran una merienda campestre en la Peña Redondera. A ver si lo podemos hacer porque es al aire libre. Yo recuerdo desde que era pequeña el subir a la Peña ese día y queremos potenciar que suban más vecinos para disfrutar de un día familiar”.
Entre las celebraciones también está San Pedro, el 29 de junio, o los carteros reales, que cumpliendo todas las medidas de seguridad e higiene vigentes sí se ha podido hacer el 4 de enero, aunque se ha trasladado de El Capricho a el atrio de la parroquia de El Enebral.
Desde 1992
La Cofradía de San Blas se creó en 1992, pero no fue hasta 2003 cuando se desarrollaron los estatutos. Además hay un reglamento interno que limita la participación en 135 socios, cifra fijada en función del aforo del salón El Capricho para la celebración de la comida de hermandad. A través de una carta se solicita la inclusión y es la Junta Directiva la que estima las altas y las bajas. “Ahora se está regularizando el número de cofrades tras una serie de bajas por defunción. La mayoría de los socios son de mediana edad o mayores. Anteriormente no había mujeres cofrades, pero desde hace unos cuatro años se permite su inclusión y han entrado muchas. Queremos que entre gente nueva”, dice la nueva presidenta Lourdes Cuesta.