El alcalde de Alpedrete denuncia una posible «huelga encubierta» de algunos agentes de la Policía Local
"Este equipo de Gobierno no admite chantajes", ha recalcado el alcalde: "No hay negociación posible hasta que no haya un pacto de no agresión y entierren el hacha de guerra"
El alcalde de Alpedrete, Carlos García Gelabert, ha denunciado la posible «huelga encubierta» de algunos agentes de la Policía Local que no acudieron a prestar servicio durante su turno del pasado 5 de enero, cuando el municipio acogió la Cabalgata y la Fiesta de la Noche de Reyes, por lo que se les ha abierto un expediente administrativo que «podría acabar en la Fiscalía porque es un delito penal. Se llegará hasta donde haya que llegar».
Según la responsable de Personal del Ayuntamiento, Itziar González Tanago Meñaca, «de los 10 efectivos que tenían turno asignado para esos servicios, nueve presentaron la baja -siete de ellos el mismo día- lo que deja entrever algún indicio de huelga encubierta». «En los últimos años», continua la edil, «en enero había unas seis bajas y este año, en lo que llevamos de mes, llevamos 15».
Tanto ella como el concejal de Urbanismo, Juan Aragoneses, han subrayado «las buenas condiciones de trabajo» que tienen los 32 efectivos (hay 36 plazas), que cobran unos 36.000 euros brutos al año (unos 5.000 euros más al año que un agente de igual categoría en Moralzarzal; en Guadarrama el salario anual bruto es de 33.800 euros y en Collado Mediano de 34.000 euros). «Ellos cobran unos 2.000 euros al mes por trabajar 16 días» -teniendo en cuenta sus turnos de siete días de trabajo y siete de libranza (u ocho y seis, dependiendo si los turnos son de mañana, tarde y noche)- mientras que un policía nacional cobra 1.500 euros y un guardia civil cobra 1.400 y tienen más competencias, y un peón de obra, 1.000″.
«Es curioso que según se van acercando las elecciones todo el mundo se pone malo y empieza a reivindicar mejoras salariales», ha apuntado Juan Aragoneses sobre los conflictos laborales que mantienen las policías locales de Collado Villalba, Galapagar, Moralzarzal o Valdemorillo. «Ellos dicen que el día de Reyes querían ver la Cabalgata con su familia, pero era su turno, si no quieren, que no se hubieran hecho policías. Es el día de año que más gente hay en la calle, incluso más que en las fiestas».
No se admiten chantajes
«Este equipo de Gobierno no admite chantajes», ha recalcado el regidor, «no ha negociación posible con este clima hasta que no haya un pacto de no agresión y entierren el hacha de guerra», en referencia a las reuniones mantenidas sobre el convenio colectivo que se vienen produciendo desde octubre de 2016 y que derivaron el pasado 21 de diciembre en una concentración a las puertas del Ayuntamiento, horas antes de la comida navideña con los empleados municipales, y en la que participaron, además de los policías locales, otros funcionarios públicos.
«Los hechos son graves y la voluntad de este equipo de Gobierno es negociar un convenio para todos, pero no puede centrarse en las demandas del colectivo más favorecido del Ayuntamiento», ha señalado Itziar González Tanago Meñaca. «También otros colectivos han presentado sus demandas laborales».
«Que se concentren en el Ayuntamiento y pidan mi dimisión, me duele», ha dicho el alcalde, «pero que se juegue con la seguridad de los ciudadanos, haciéndoles rehenes, está mal. No podemos ser pasivos con esta situación que ha creado la Policía Local».
«Otros colectivos también protestaron el día 21, es su derecho, pero luego se han hecho cargo de su trabajo, como el Servicio de Obras, que ha atendido todas las demandas, Limpieza y Jardines», ha puesto de manifiesto la primera teniente de alcalde, Ana Isabel Balandín, quien recordaba los hechos ocurridos durante la Fiesta de Nochevieja cuando se concentraron a la puerta de la carpa de Navidad cientos de vecinos que pretendían entrar a un recinto cuyo aforo era de 610 personas. «Afortunadamente no ha habido ningún acontecimiento que tengamos que lamentar» ha dicho Balandín agradeciendo el apoyo de los miembros de Protección Civil, que realizan su labor de forma desinteresada, de la empresa de seguridad privada que se contrató así como de la Guardia Civil, de un agente voluntario de la Policía Local y de varios mandos que tuvieron que doblar su turno. «Los vecinos no se merecen el trato que han recibido de la Policía en estas fiestas, que en algunos momentos ha sido multitudinaria».
«La Policía quiere ahora que este equipo de Gobierno les ría las gracias y saque más plazas para ellos trabajar menos. Han estado acostumbrados durante muchos años a vivir bien», ha continuado Aragoneses, que denunciaba que «los responsables sindicales dijeron que ellos no habían colgado las pancartas de «Alpedrete sin policía». Hay cosas con las que no se puede jugar, solo faltaba que colgasen carteles para que vengan los ladrones».
Desde el equipo de Gobierno se apoyan en la ratio de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), que habla de 18 policías por cada 10.000 habitantes, por lo que en el caso de Alpedrete (unos 15.000 vecinos), lo recomendable sería tener unos 27 efectivos, cifra que se supera. «Además este es un pueblo pequeño, donde no hay gran conflictividad social, y las distancias son pequeñas, pero es que además, estamos por encima de la ratio», concluye la concejala de Personal.