Dávila explica que la intoxicación en Torrelodones parece deberse a «una rotura de la cadena de frío» y que fue «leve»
La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, ha explicado que la intoxicación alimentaria producida hace 10 días en dos centros de Torrelodones «parece» que ocurrió debido a «una rotura de la cadena de frío», aunque ha instado a «esperar a que lo verifique el Servicio de Salud Pública», y ha añadido que «fue leve».
La responsable regional ha recordado que se pusieron en marcha «inmediatamente los protocolos de salud pública para tomar muestras de los alimentos».
Hasta el momento se han confirmado 10 personas afectadas con cuadros de diarrea que aparecieron al día siguiente, según fuentes de la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales. «La sintomatología desapareció en 24 horas y no hubo hospitalizados», recalcan estas mismas fuentes.
La intoxicación alimentaria ocurrió el pasado 31 de octubre en la cocina de la residencia infantil Nuestra Señora de Lourdes de Torrelodones, que también sirve la comida a la escuela infantil El Tomillar, situada en el mismo municipio. «La causa del brote estuvo en una mala conservación de un cocido tras su su elaboración en la cocina de la residencia infantil, por un procedimiento de enfriamiento incorrecto», han recalcado fuentes de la Consejería.
Críticas de la oposición
El PSOE-M y Más Madrid han reclamado a la Comunidad de Madrid una mayor financiación y «buenos contratos» para las empresas que prestan el servicio de comedor, tras conocerse la noticia de la intoxicación alimentaria.
El secretario general, Juan Lobato, ha criticado nuevamente la gestión de la Comunidad de Madrid por no destinar los recursos suficientes para prestar una atención adecuada y ha insistido en la necesidad de «buenos contratos», porque «con cuatro euros no se puede pagar el desayuno, comida, merienda y cena a las personas mayores».
En línea similar se ha pronunciado la portavoz de Más Madrid en la Asamblea de Madrid, Manuela Bergerot, que ha denunciado que el Ejecutivo regional «sigue reincidiendo con empresas que suministran comida en mal estado». «Que suceda esto una vez más puede ser fruto de una simple mala gestión, pero que suceda tantas veces es complicidad y negligencia grave», ha recalcado.
