Pablo Iglesias denunció en octubre el pirateo de una de las cámaras de seguridad que vigilaba el exterior de su vivienda en Galapagar
La Guardia Civil abrió una investigación el pasado mes de octubre tras denunciar Podemos que se había pirateado la señal de la cámara de seguridad que vigilaba el exterior de de la vivienda en Galapagar de los líderes de esta formación, Pablo Iglesias e Irene Montero, según han confirmado fuentes del Ministerio del Interior.
El diario «El País» ha informado este lunes que Podemos denunció el 17 de octubre de 2018 ante el Ministerio del Interior que la cámara de seguridad que la Guardia Civil había instalado en la vivienda de Pablo Iglesias e Irene Montero en Galapagar había sido hackeada. Según este periódico, las imágenes captadas por el dispositivo de seguridad se podían ver en tiempo real en una página web de acceso libre. La formación política que lidera Iglesias recibió tres días antes de denunciar los hechos un anónimo con pantallazos de ese sitio web. La investigación de la Guardia Civil condujo a los agentes hasta un servidor en Singapur, pero no pudieron identificar a los autores del pirateo.
Las citadas fuentes explican que la cámara pirateada estaba camuflada y vigilaba el perímetro exterior del chalet de La Navata donde viven Pablo Iglesias e Irene Montero, una medida de seguridad que se adoptó para evitar pintadas en la fachada y, sobre todo, para proteger el coche policial también camuflado y que formaba por entonces parte del dispositivo de seguridad sobre la vivienda.
No obstante, fuentes de Interior indican que la cámara de vigilancia sobre el perímetro exterior del chalé siguió activa «unas semanas», ya que poco después de este incidente se retiró y se sustituyó por la actual garita de la Guardia Civil que vigila la vivienda de Galapagar.
Pablo Iglesias ha denunciado en los últimos días las maniobras policiales para perjudicar a Podemos, sobre todo a raíz de la investigación en la Audiencia Nacional, dentro del caso Villarejo, que salpica a otros agentes de la Policía de la etapa de Jorge Fernández Díaz en el Ministerio del Interior y que supuestamente habrían recabado datos para perjudicar a la formación morada. Esta investigación ya ha supuesto la renuncia del hasta hace unos días número dos de Comunicación del Gobierno de Pedro Sánchez, Alberto Pozas, ex director de la revista «Interviú». Según el líder de Podemos, las ‘cloacas’ del Estado siguen activas en la actualidad, algo que ha negado en reiteradas ocasiones el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.