La alcaldesa de Collado Villalba, Mariola Vargas, se enfrentará a su cuarta moción de reprobación en diez años

El grupo municipal del Partido Socialista reprocha la actitud "despótica" de la regidora, reiterando, como ya hiciera en la sesión plenaria de ayer, donde expulsó a dos concejales, que "es una sinvergüenza y una irresponsable como presidenta del Pleno".

El grupo municipal del Partido Socialista de Collado Villalba pedirá la reprobación de la alcaldesa, Mariola Vargas, tras lo ocurrido en el Pleno ordinario de enero celebrado ayer, jueves, donde fueron expulsados dos ediles durante el turno de preguntas relacionadas con el área de Deportes; en un primer momento, el representante de MCV Corazón Villalbino Roberto Ramos, y posteriormente el portavoz del PSOE, Andrés Villa. Rodeado de todos los miembros del grupo, Villa lamentaba el comportamiento «soberbio y prepotente» que de «manera reiterada» ha mostrado a lo largo de toda la legislatura de la regidora, «que no se ciñe a los temas ni a las cuestiones que se le plantean desde los diferentes grupos políticos sobre los problemas de Collado Villalba».

Imagen del grupo municipal del Partido Socialista de Collado Villalba, ayer durante la comparecencia de su portavoz, Andrés Villa

El también secretario general del PSOE villalbino ha reprochado la actitud «despótica» de la alcaldesa, reiterando, como ya hiciera en la propia sesión plenaria que «es una sinvergüenza y una irresponsable como presidenta del Pleno». «Es una sinvergüenza que retuerce el funcionamiento democrático de este Ayuntamiento hasta un punto que huele ha podrido», ha añadido.

El portavoz del PSOE, Andrés Villa

«Una alcaldesa prepotente, soberbia y manipuladora»

«Esta situación no se sostiene más, esta ciudad no se merece a una alcaldesa prepotente, soberbia y manipuladora», por ello han solicitado la convocatoria de un Pleno Extraordinario, en base al artículo 4.1 del Reglamento Orgánico Municipal, con un único punto del Orden del Día, la Moción de reprobación contra la alcaldesa de Collado Villalba. Este Pleno deberá ser convocado por la alcaldesa en un plazo de 15 días hábiles a partir de su entrada en el registro.

Sobre si esta Moción de Reprobación sería el paso previo a una Moción de Censura, el líder de los socialistas villalbinos se ha mostrado tajante: «Dejar esto en una reprobación no va a servir de nada». «Hay una situación de degradación institucional a la que Mariola está llevando a este Ayuntamiento y a esta ciudad. El Pleno tiene que tomar cartas en este asunto de una vez por todas y los grupos municipales y los concejales de manera individual van a tener que posicionarse y mostrar si están de acuerdo con este olor a podrido o no, con esta forma despótica de gobernar esta ciudad o no».

Una moción de reprobación es una herramienta política más simbólica que práctica, pues se suele tratar de afear una conducta o, incluso, de pedir la destitución de un político. El resultado de la votación no es vinculante.

Mentiras sobre los concejales

Lo ocurrido ayer es para los socialistas la gota que ha colmado el vaso. «El concejal de Urbanismo, el señor Martínez Valdegrama, al igual que en otras ocasiones el concejal de Deportes, el señor Dalda, han insinuado que el concejal del PSOE, Pérez Bállega, más conocido como Macario, sigue estando ligado y mantiene intereses dentro del Club UB Baloncesto Villalba», algo que no es cierto ya que el pasado 26 de mayo de 2023, antes de que se celebrasen las elecciones municipales y que, por tanto, recogiera el acta de concejal, Pérez notificó a la asamblea de la entidad que dejaba su puesto tanto de vicepresidente como de director deportivo. 

«Lo saben, pero insisten, y parece mentira que sea este equipo de Gobierno el que lo haga cuando hasta hace pocos meses una de sus concejalas era presidenta de una asociación muy importante de esta ciudad que además recibe fondos de este Ayuntamiento. Hay que tener la cara de hormigón armado», en relación a la presidencia de Lourdes Cuesta, edil de Cultura y Educación, en la Cofradía de San Blas. 

«En su turno de preguntas, (Macario) le ha advertido que sería la última vez ya que la próxima iría a otro sitio, refiriéndose a los tribunales, y la alcaldesa le ha quitado el turno de palabra arbitrariamente. Su concejal vierte mentiras abiertamente y en lugar de quitarle la palabra, se la quita al mío».

Tono chulesco

Además, Andrés Villa ha aprovechado para criticar el «tono chulesco» de algunos concejales del Partido Popular en sus respuestas así como «los golpes en sus mesas a modo de aplausos durante las intervenciones de sus compañeros del PP». 

Para finalizar, el portavoz socialista ha querido pedir disculpas a los vecinos por lo ocurrido. «No es el ejemplo que hay que dar».

Cuatro mociones de reprobación en 10 años

Esta sería la cuarta ocasión que Mariola Vargas se enfrenta a una moción de reprobación. En enero de 2023, el grupo municipal Unidas por Collado Villalba presentó una moción sobre su gestión en esa legislatura, moción que salió adelante ya que PSOE, Unidas por Collado Villalba, MCV Corazón Villalbino y Más Madrid votaron a favor mientras que Vox y Ciudadanos, por aquel entonces dentro del equipo de Gobierno, se abstuvieron. 

En septiembre de 2020, Más Madrid, Unidas por Collado Villalba y Partido Socialista presentaron una moción para reprobar la actitud de la alcaldesa por la retirada del único punto del orden del día del Pleno extraordinario del 1 de septiembre, convocado por la cuarta parte de los concejales de la Corporación, sobre el futuro del mercadillo. La moción no salió adelante ya que solo contó con los votos a favor de toda la oposición (Más Madrid, Vox, Más Collado Villalba, Unidas por Collado Villalba y PSOE), mientras que el equipo de Gobierno (PP y Ciudadanos) votaron en contra.

En septiembre de 2016, los grupos municipales del Partido Socialista, Cambiemos Villalba, Ciudadanos e Izquierda Unida reprobaron la actuación de la alcaldesa por el «incumplimiento de la mayoría de los acuerdos aprobados por el Pleno» y las «graves irregularidades cometidas por el equipo de Gobierno del Partido Popular», lo que implicó que Mariola Vargas volviera a perder una moción de reprobación. 

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