Comisiones Obreras se reúne con la alcadesa de Collado Villalba y pide la creación de una Mesa por el Empleo
El secretario general de Comisiones Obreras en la Comunidad de Madrid, Jaime Cedrún, y el de la comarca Oeste, José Guadarrama, se han reunido este miércoles con la alcaldesa de Collado Villalba, Mariola Vargas, a la que han planteado la necesidad de abrir “una Mesa por el Empleo”, con la presencia de sindicatos, empresarios y responsables municipales.
El objetivo es poner en marcha un plan local que venga acompañado de inversiones para la mejora de las infraestructuras y de los polígonos existentes en la localidad, además de iniciativas dirigidas a la formación para fomentar un empleo de calidad. Igualmente, Comisiones Obreras reclama que las mejoras no se trasladen únicamente a los trabajadores municipales, sino también a todas las empresas que contraten con el Ayuntamiento. En este sentido, el sindicato considera que en la contratación se deben incluir “cláusulas sociales”, así como medidas de fomento de la igualdad entre hombres y mujeres.
Además, CC OO pretende extender estos encuentros a otros municipios de la zona Oeste, con la intención de reunirse en breve con los alcaldes de Las Rozas y Pozuelo. “La alcaldesa se ha comprometido a abrir esta mesa con el empleo”, aseguró Cedrún, añadiendo que en Collado Villalba “hay debilidades, pero también fortalezas que pueden dar juego y que son importantes para trabajar en la creación de un empleo de calidad”.
Luchar contra la precariedad
Además, el secretario general de Comisiones Obreras en Madrid incidió en la importancia de “luchar contra la precariedad”, más aún en contexto de “paralización política” como el actual. “Tenemos un mercado laboral enfermo, que no genera empleo suficiente, y el que se crea además es precario, lo que tiene consecuencias nefastas, porque estamos generando trabajadores pobres y no podemos avanzar en materia de igualdad”, señaló.
Cedrún indicó que es imprescindible poner en marcha el “diálogo social” con el Gobierno regional, con el fin de “reducir los 364.000 parados que hay en la Comunidad de Madrid”, situación que afecta muy especialmente a los sectores más vulnerables.