Ciudadanos pretende que el Pleno de Collado Villalba revise de oficio el contrato de la obra del túnel de Honorio Lozano
Los cuatro concejales del grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Collado Villalba han solicitado al secretario municipal un informe (aunque según recoge el Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales es necesario un tercio de la Corporación -en el caso villalbino formada por 25 ediles- para pedir este tipo de informes) para someter a la consideración del Pleno (el órgano de contratación) el inicio de un procedimiento de oficio para revisar el contrato de la obra del túnel Honorio Lozano-Batalla de Bailén y de los aparcamientos de Honorio Lozano y la Biblioteca Miguel Hernández.
Esta acción de Ciudadanos se produce después de conocerse la sentencia sobre el canon correspondiente al año 2019, que obliga al Consistorio a su pago. Tras su recepción, los asesores jurídicos externos contratados por el Ayuntamiento elaboraron un informe que habla de la ilegalidad de contrato pero en el que se recomienda no recurrir esta decisión judicial y explorar otras vías para su solución, además de las penalidades ya iniciada por el incumplimiento en el mantenimiento de la instalación por parte de la empresa concesionaria.
Si finalmente se lleva a Pleno y la Corporación aprueba la revisión de oficio del contrato, hay un plazo de seis meses para resolverlo y que el informe se presente ante el Consejo de Estado, que tendrá que emitir un informe preceptivo y vinculante sobre la legalidad del contrato, un tiempo que podría sobrepasar la legislatura actual, que finaliza el 28 de mayo de 2023 con unas nuevas elecciones municipales, de ahí la insistencia de Bernardo Arroyo de apremiar a sus compañeros, a los que esta mañana apelaba a la responsabilidad.
«No podemos ser perezosos y decir que no vamos a tener éxito; solo me planteo si estoy pagando un contrato ilegal. Bajar los brazos es una cuestión que no podemos permitirnos. Tenemos la obligación de llegar hasta el final, explicar y aclarar con la máxima celeridad. Considero que es el tema más importante que tenemos entre manos. No es una obsesión del concejal de Contratación, es una obligación«, ha reiterado.
Con la intención de llevar ante el Pleno la revisión del contrato, Ciudadanos pretende iniciar un nuevo procedimiento que determine la legalidad o no de un contrato firmado por el ex alcalde socialista José Pablo González hace 15 años, tiempo en el que habría prescrito cualquier delito.
Pagar sin comprobar
En la rueda de prensa celebrada esta mañana, el primer teniente de alcalde y concejal de Contratación, Bernardo Arroyo, ha subrayado que desde 2008, el Ayuntamiento, ha abonado las facturas del canon sin fiscalizar, sin comprobar si el mantenimiento del túnel y los aparcamientos se había llevado a cabo en este tiempo, requisito imprescindible que deben cumplir tanto Intervención como la Concejalía de Urbanismo, que firma las facturas. «Cuando llega una factura del canon al Ayuntamiento es necesaria un acta de conformidad, no sobre la obra, que ya se ha entregado, sino sobre el resto de las obligaciones. El pago del canon implica el reconocimiento de la conformidad», ha dicho.
Arroyo inició un expediente de penalidades entre los años 2016 y 2019, «pero pedí varias periciales y desde el inicio en 2008 nunca han cumplido nada». «Cuando pido las facturas para ver qué inversiones se han hecho me dan de papel higiénico, botellas de agua… y varios espectáculos que la empresa pagó al Ayuntamiento (circo, conciertos, cine de verano… que suman unos 19.000 euros)».
«El Plan Económico y Financiero es muy oscuro y complicado; nadie lo entendía en el Ayuntamiento», ha sentenciado el concejal de Contratación, que ha llegado a decir que a todos los concejales de Urbanismo les parecía que había «algo raro».
«Ahora, ¿quien va a pagar el canon de 2020?«, se ha preguntado Arroyo recordando que el informe del abogado del Ayuntamiento habla de «contrato ilegal».
Tras la sentencia
En la sentencia del pasado 27 de julio, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo nº 34 de Madrid reconoce el derecho de la concesionaria del túnel y aparcamientos de cobrar la factura, por un importe de 1.718.851 euros, correspondiente al citado ejercicio, estimando así el recurso presentado por la empresa y obligando al Consistorio a este pago, al que hay que sumar 315.402,92 euros de intereses y unos 1.200 euros de las costas.

Disconformidad por no recurrir la sentencia
Vargas, ha asegurado que en los presupuestos para 2022 se contempla esta partida, así como el pago del canon de los años 2020 (también con intereses) y de 2021 (aún en plazo).
