Alpedrete levanta este sábado el telón para «Las visiones de Hildegard», sobre la vida de esta erudita alemana del siglo XII
Un "proyecto multidisciplinar" sobre la figura de Hildegard von Bingen, una abadesa alemana del siglo XII cuya figura fue esencial dentro del mundo artístico, filosófico y científico medieval, así se presenta el montaje teatral "Las visiones de Hildegard" que se representará este sábado, 6 de mayo, a las 19 horas, en la Casa de Cultura Asunción Balaguer de Alpedrete. "Hildegard fue una mujer equiparable a Leonardo Da Vinci, una visionaria, pero por su condición femenina es poco conocida", ha reconocido José Antonio Alfonso, concejal de Participación Ciudadana. "Cuando nos presentaron el proyecto, nos encantó. Es una obra diferente sobre una persona que sabía mucho de muchas cosas", ha señalado María Luz Sancho, responsable de Igualdad, durante la presentación de la obra, a la que han acudido el director, Ignacio Calvache, y una de las actrices Mamen Martín.
La obra narra la vida de esta mujer desde los 42 años hasta su muerte a través de 12 escenas con textos originales escritos por ella. «Había tenido visiones desde los 3 años, cuando Dios la hablaba y ella lo transcribía y dibujaba. A pesar de que vivió hasta los 82 años, mucho para su época, era débil de salud y estuvo al borde de la muerte en varias ocasiones. Ella decía que enfermaba porque no contaba sus visiones, pero a los 42 años decidió cambiar», cuenta Calvache. «Tenía amplios conocimientos de medicina y fue pionera en homeopatía y las Flores de Bach; también fue escritora, en un tiempo donde necesitaba el permiso del Papa Eugenio III para escribir, y compositora, sin estudiar música fue precursora del Canto Gregoriano, y fundó su propio convento femenino, que en aquella época dependía de uno masculino. También fue predicadora e hizo dos giras por Alemania; allí es como Santa Teresa aquí».
Dos actrices para un papel
Cuando Ignacio Calvache comenzó a preparar la obra pensó que la complejidad del personaje estaría mejor representado por dos personas. Escogió a Mamen Martín y Mariu del Amo, dos actrices invidentes. «Dentro de una persona hay muchos matices y más con Hildegard, una mujer muy complicada. Yo soy la más terrenal, la más realista y luchadora mientras que el personaje de Mariu es más pasional y no tiene los pies en el suelo», explica Martín, quien reconoce que el director «ha sido muy duro, pero al final lo ha conseguido y me ha dado seguridad para hacerlo. Cuando, a veces, tras un giro, no me quedo bien colocada en el escenario, lo corrijo y ya está. Con el tiempo vas creciendo e interiorizando el personaje».
«Son dos mujeres diferentes pero se complementan», ha asegurado el director, «el resultado es más rico». Más de un año duró la preparación de este montaje. «Empleamos un arte marcial para ayudar a expresarnos en el escenario. Hubo preparación física, de voz, de texto, la música…».
Ambas comparten escenario con un músico, que da vida a las composiciones de Hildegard, y una proyección donde los espectadores pueden ver las visiones que tuvo esta monja a lo largo de su vida. «Es una escenografía muy cuidada con un duelo actoral muy intenso», resume Calvache.
La obra lleva en cartel desde hace cuatro años y se ha representado en festivales y mútiples lugares de toda la geografía española, entre ellos El Boalo y Moralzarzal, donde reside el director. «Estoy sorprendido por cómo han interiorizado el personaje. Siempre hemos tenido buena acogida. La obra ha ido creciendo. Estuvimos un año sin representarla y cuando volvimos, resultó fresca».
Tras la representación de la obra el próximo sábado, se realizará un coloquio con el director y los miembros del grupo de teatro “Contando Hormigas”, creado en 2004, y desde el que se ha desarrollado el proyecto.
