El novillero mexicano Julián Garibay se recupera en el Hospital de Villalba tras la grave cogida sufrida en Moralzarzal
El joven novillero mexicano Julián Garibay resultó herido de gravedad este domingo cuando toreaba en la plaza cubierta de Morarzarzal. El sexto astado de la tarde, con el hierro de Los Lastrones, le prendió aparatosamente, provocándole una cornada en el Triángulo de Scarpa, con cuatro trayectorias de 20, 15, 20 y 25 centímetros. Fue intervenido en la enfermería de la propia plaza por el doctor Enrique Crespo.
El parte médico reflejaba luego la gravedad de la cogida: “Herida por asta de toro en Triángulo de Scarpa izquierdo con cuatro trayectos; uno hacia arriba de unos 20 cm por encima del ligamento inguinal que desgarra el músculo oblicuo mayor sin aparente lesión abdominal; otro hacia fuera y arriba que llega a la espina ilíaca superior de unos 15 cm; otro hacia fuera de unos 20 cm que llega a la cara externa del muslo, lesionando vasto externo y tensor de la fascia lata; y el último hacia abajo de unos 25 cm hacia dentro y abajo que secciona músculo sartorio y desgarra músculo crural. Hemorragia venosa por arrancamiento de múltiples colaterales musculares. Contusión torácica. Pronóstico muy grave”.

Cuatro trayectorias
«Ha tenido mucha suerte a pesar de las cuatro trayectorias, porque creo, aunque no lo puedo asegurar, que no ha penetrado en el abdomen, y la otra trayectoria, la que iba hacia abajo hacia el muslo, -lo único, que ya es bastante-, ha desgarrado los músculos que protegen la vena y la arteria femoral, que no las ha arrancado, no las ha tocado. Le ha arrancado el músculo que digamos va por encima de ellas», explicaba el doctor Enrique Crespo en declaraciones a Mundotoro.com
Tras la intervención quirúrgica, Julián Garibay, de 21 años, fue trasladado al Hospital de Villalba.
En cuanto al resto del festejo, Valentín Hoyos y Daviz López fueron silenciados en todos sus oponentes. Solo el propio novillero mexicano logró dar una vuelta al ruedo tras la faena al tercero de la tarde.
Esta cogida se une a la que sufrió un joven en el encierro celebrado el sábado.
