Microcemento: un material de construcción y diseño con mucha popularidad en Madrid
Las tendencias en diseño de interiores han dado mucho de qué hablar en los últimos años, especialmente por una nueva corriente que lleva a las empresas constructoras, estudios de arquitectura, fábricas de materiales y más, a ofrecer innovadoras alternativas que impulsen un modo de vida más cónsono con el planeta y el medio ambiente.
La corriente ecológica o también llamado modo sostenible, hace referencia al uso de materiales, en todo ámbito (construcción, diseño, belleza, salud, moda, etc.) a elegir materiales o ingredientes, cuyo proceso de fabricación o elaboración no impacten de forma tan negativa al planeta, tal como se ha venido haciendo.
De esta forma, se le ha dado paso al uso de nuevos materiales que sí cumplan con estos propósitos que buscan, de alguna manera, resarcir el daño que la “mano del hombre”, le ha hecho a la tierra.
Limitandonos a hablar del mundo de la construcción, las reformas y el diseño de infraestructuras e interiores, sale a relucir un material que cada vez cobra más fuerza dentro de las preferencias de diseñadores, contratistas, arquitectos y propietarios de todo tipo de inmuebles. Se trata del microcemento.
¿Qué es el microcemento?
No es más que una mezcla de cemento con otros aditivos especiales como resinas, áridos y pigmentos. Es un material con muchas cualidades que hacen que no haya limitaciones en su modo de aplicación, ni en el tipo de superficies donde se puede instalar. Empresas como Luxury Concrete se han posicionado en el mercado que, hoy en día, es bastante competitivo, en cuanto a calidad y perfeccionamiento en la elaboración y aplicación del microcemento.
Su experiencia y estudio en la elaboración de este producto les han otorgado un puesto significativo en la lista de alternativas que hay en el mercado para elegir a las mejores empresas. En Madrid, puedes conseguirla y establecer alianzas especiales que te permitan garantizar los mejores resultados en cualquier tipo de proyecto que involucre el microcemento como material estrella.
¿Cuáles son las ventajas del microcemento y por qué es un material tan popular?
Tal como lo hemos mencionado, son muchas las ventajas que tiene el microcemento. La intención de este artículo es mencionar en detalle las más importantes, para que así decidas con más seguridad y confianza, elegirlo para revestir las superficies de cualquier propiedad o inmueble. Pero partamos del hecho que quieres construir de cero o reformar tu hogar.
Consigue espacios más pulcros y elegantes
El microcemento se puede aplicar casi en cualquier tipo de superficie. Al ser una capa de por los menos 3 milímetros, se puede extender con facilidad sin la necesidad de crear juntas. Esto quiere decir que podrás disfrutar de superficies completamente lisas, lo que genera una visión mucho más estética que proyecta amplitud y elegancia.
Es ideal para aplicar en suelos, paredes, techos, fachadas e incluso en muebles. Algunos de los ambientes más demandados por el microcemento son las cocinas y los baños, aunque cualquier otro espacio de una casa se puede ver sumamente precioso con este material.
En el caso de las cocinas, el microcemento se puede aplicar en el suelo, en paredes, en encimeras y salpicaderos, incluso los armarios de este lugar pueden ser construidos y revestidos con este material.
Impermeabilidad, higiene y resistencia
Siguiendo con la idea de aplicarlo en cocinas y baños, hay que sumar a su lista de ventajas que el microcemento es un material impermeable, soporta muy bien la humedad y además es altamente resistente y duradero.
Estas propiedades lo convierten en un material ideal para estos espacios donde hay zonas de agua, pero además, al no tener juntas y no ser poroso, no se acumula suciedad o mugre, lo que sí suele suceder con otros materiales, como por ejemplo, con los azulejos o baldosas.
La versatilidad es su punto fuerte
Es imposible seguir hablando del microcemento sin hacer mención a su versatilidad. Y es que este es un material que se adapta de forma fascinante a cualquier estilo de diseño. No hay duda alguna en que es el principal aliado del estilo de diseño minimalista y el industrial. Su aspecto prolijo y sencillo es perfecto para combinar con pocos elementos y crear ese ambiente simple pero elegante, propio del estilo minimalista.
A la vez, es perfecto para mezclar con otros materiales característicos del estilo industrial, como puede ser el metal, el PVC u otros materiales como el ladrillo. Pero también se ve muy bien con materiales naturales como la madera y la piedra. Al apostar por el microcemento podrás disfrutar de un ambiente acogedor, cálido y sumamente elegante y de buen gusto.
Por otro lado, se suma la posibilidad de elegirlo en diversas tonalidades. Cuando se habla de algún producto derivado del cemento, lo más común es que venga a nuestra mente el tradicional color gris, pero debes saber que es posible añadir pigmentos a la mezcla y conseguir un microcemento rojizo, con tonos verdes, azulados o blancos y beiges. No hay límites en la creatividad que puedes aprovechar para implementar diseños y decoraciones originales y con mucho estilo.
También puede convertirse en un punto focal, de mucho carácter, en la decoración de un salón, vestidor, comedor o dormitorio. Si no te convence la idea de revestir todo con este material, seguramente sí te llamará la atención aplicarlo en una pared que destaque en cualquier espacio de tu hogar.
El microcemento es imponente y tiene mucha personalidad, así que no debes temer si solo quieres que funcione como un elemento decorativo. Es igualmente perfecto. Pero si eres amante de su imagen y del resultado que se puede alcanzar con su uso, aplicarlo en suelos y paredes es una idea fabulosa.
Fácil mantenimiento
Como la guinda del pastel, se debe resaltar que su mantenimiento y limpieza es muy sencillo, basta con usar agua y productos comunes de higiene y aseo. Una vez más, al no tener juntas, limpiarlo es una tarea muy fácil. Dependiendo de su acabado, periódicamente se le puede hacer un retoque, especialmente si has decidido que tenga brillo.
