Galapagar busca al nuevo José Tomás entre los alumnos de su primera Escuela de Tauromaquia
20 jóvenes forman parte ya de esta escuela, bajo la dirección artística de Sebastián Ritter. La intención, señaló la alcaldesa, Carla Greciano, es "preservar la fiesta del toreo como uno de los legados de nuestro municipio".
Valor, capacidad de sacrificio y esfuerzo son tres de los requisitos que se le piden a un buen torero, como los que ahora se forjan en la recién creada Escuela Taurina de Galapagar. Se trata de una apuesta personal del concejal de Festejos y Asuntos Taurinos, Javier Álvarez, que hoy ha sido presentada esta mañana en el parque de El Toril.
Galapagar, pueblo taurino por excelencia, cuna de grandes toreros como José Tomas y ganaderos de leyenda como Vitorino Martín. Por todo ello este municipio serrano no podía menos que tener su propia escuela taurina y así se acaba de presentar como uno de los compromisos del equipo de Gobierno que encabeza Carla Greciano para preservar las fiestas del toreo como una de las señas de identidad de la localidad.
Tal y como explica el concejal, esta escuela pretende ser «mucho más que un centro de formación, convirtiéndose en un espacio de cultivo de la cultura y el arte que envuelve la tauromaquia, fomentando nuestras tradiciones como pueblo ganadero y propiciando además que este legado se perpetúe en futuras generaciones».
El entrenamiento es clave y por eso en el parque de El Toril se dan cita los 20 alumnos (algunos de Galapagar y otros procedentes de localidades vecinas, como Las Rozas o Colmenarejo, e incluso de Guadalajara o Talavera de la Reina) que ya forman parte de la escuela y que entrenan periódicamente con el sueño de verse un día debutando en Las Ventas.
Dirección de Helena García y Sebastián Ritter
Este proyecto además ha sido acogido por dos grandes expertos en la materia. La Escuela de Tauromaquia -que procede en buena parte de la que hasta hace unos meses existía en Valdemorillo- se estrena bajo la presidencia de Helena García y, además, ha encontrado en Sebastián Ritter, matador de toros, a su director artístico. El colombiano Sebastián Ritter (Medellín, 1992), que tomó la alternativa en 2013, lidera un equipo de trabajo comprometido y altamente capacitado, entre los que destaca la figura del banderillero David Blázquez, conocido por su destreza y profesionalidad en el ruedo.
«Es un proyecto muy ilusionante, porque gracias al apoyo de la directiva de la Asociación Taurina y del Ayuntamiento, a través del concejal de Festejos y de la alcaldesa, hemos venido al que creo que es el pueblo más taurino de España, que a nivel mundial es reconocido porque la mayor figura del toreo de los últimos tiempos, como es José Tomás, es de Galapagar, y también algunas de las mejores ganaderías, como las de Victorino y Adolfo Martín», explicaba Ritter.
Bajo la tutela de estos maestros, 20 jóvenes se han embarcado en la difícil tarea de hacerse hueco en el mundo del toreo. Así, estos alumnos no sólo adquieren habilidades técnicas, sino que también se empapan de los valores que caracterizan a la tauromaquia. «Estos muchachos tienen el sueño de ser toreros; han dejado todo para venirse aquí y poder entrenar con la escuela».
El día a día en la escuela
En cuanto al día a día en la escuela, los entrenamientos suelen tener lugar por la tarde, de 18:00 a 22:00. «Intentamos inculcarles los valores del toreo, como la disciplina, el sacrificio, la responsabilidad, el llevar una vida sana para poder estar de cara al animal lo más puro y preparado posible; y luego, que lleven estos valores a la vida diaria, porque ojalá todos puedan ser figuras del toreo, pero si no lo son, sabemos que con esos valores se pueden defender en la vida», explicaba el director artístico de este centro.
La alcaldesa, Carla Greciano, subrayaba que la tauromaquia forma parte de la esencia misma de la localidad: «Estamos buscando al futuro José Tomás, para que siga llevando el nombre de Galapagar más allá de nuestras fronteras», decía, mientras el edil de Festejos, Javier Álvarez, avanzaba que los alumnos de la Escuela Taurina participarán en una clase práctica dentro de la feria que se celebrará el próximo mes de septiembre, coincidiendo con las fiestas patronales.
Una de las alumnas, Carla, que viene desde Guadalajara, explicaba que el toreo es «una carrera de fondo», con el objetivo de «llegar un día a tomar la alternativa», entrenando a diario y estando centrada también en las próximas novilladas en las que hará el paseíllo. Algo parecido comentaba Luis, que acude a la escuela desde San Rafael (Segovia): «Es lo que me llena, es por lo que me levanto cada día». Sobre la posibilidad de torear en Las Ventas, aseguraba que «es una tarde con la que soñamos todos; cuando tenga que ser, será, y mientras tanto hay que seguir preparándose».
Marta Martín hará el paseíllo el 26 de julio en Collado Villalba
Otra de las alumnas es Marta Martín, de Talavera de la Reina, que se ha venido a vivir a Madrid para poder continuar con su formación en la escuela y a la que pronto podremos ver torear en la Sierra. «Decidí que mi vida entera debía estar enfocada al toro, y para mí los mejores profesionales están aquí, en Galapagar», comentaba esta joven de 20 años, que ha buscado trabajo en la zona para poder hacer frente a su gran sueño. «No concibo la vida sin ser torero; es lo más duro del mundo, y también lo más bonito», añadía.
«La filosofía de los maestros es entrenar duro para que luego podamos estar solventes en la plaza; dedicamos mucho tiempo al físico, corremos por aquí, tanto que los paisajes de Galapagar nos lo sabemos ya de memoria, y luego venimos a torear de salón para mejorar la técnica», señalaba la prometedora novillera talaverana.
Entre sus referentes, Marta Martín señaló que entre los clásicos estaría Antonio Chenel «Antoñete» y, como figura más actual, citó al maestro Morante de la Puebla. Sus próximos compromisos como novillera serán el 14 de julio en Manzanares, el 26 en Collado Villalba -dentro de las fiestas de Santiago Apóstol- y el 28 en Candelario (Salamanca).