El Instituto Bilingüe Cañada Real de Galapagar realiza su tradicional homenaje a las víctimas del Holocausto
El alcalde de Galapagar, Alberto Gómez, y la concejala de Educación, Rosa María Encuentra, participaron el pasado viernes en el homenaje que realiza el Instituto Bilingüe Cañada Real, con motivo del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto.
El alumnado de este centro trabaja de manera cooperativa en el proyecto SHOA, siendo este año el tema tratado “El Holocausto a través del cine”. Gracias a este proyecto, desarrollan un trabajo educativo para poder comprender el sufrimiento del Holocausto para los judíos y para el resto de los colectivos que se vieron especialmente perseguidos durante la II Guerra Mundial por el nazismo.

Antes de comenzar el acto, el regidor y la edil conocieron de primera mano los trabajos realizados por estudiantes de 4º ESO del IES Cañada Real, en los que se muestra lo que han aprendido sobre el Holocausto y que, de esta forma, conozcan la historia para evitar que esta situación se pueda repetir en el futuro.
Tras la exposición de los trabajos, tuvo lugar el acto institucional, en el que también estuvieron presentes Alberto Gómez y Rosa María Encuentra junto a la siguientes personalidades: del Centro Sefarad Isarael, Ramón de Albert; la vicepresidenta de la asociación Amical, Concha Díaz; y la hija del famoso “Ángel de Budapest”, Ángela Sanz Briz. Su padre era un diplomático del Gobierno de Franco que se jugó su vida por salvar a muchísimas personas de ser deportadas en los trenes dirigidos a los campos de concentración.

La importancia de no olvidar
Durante el acto, parte del alumnado realizó una actuación musical y dio lectura a textos relacionados con el tema del Holocausto. Para concluir, como cada año, se invitó a las personalidades a realizar el tradicional encendido de velas y se guardó un minuto de silencio como final de este emotivo homenaje.
El primer edil galapagueño, Alberto Gómez, agradeció la invitación al director del IES Cañada Real, Juan María González, y a la coordinadora de este proyecto, Charo Sánchez, y confesó que, “como amante de la Historia, es de los actos más bonitos que tengo a lo largo del año; para mí es algo muy especial y muy duro, pero es importante no olvidar lo que pasó para que las generaciones presentes y futuras no lo repitan”.
