La empresa de la Escuela Infantil El Manantial, en Galapagar, se declara en concurso de acreedores
El Ayuntamiento traslada su apoyo a los trabajadores y ya ha iniciado el proceso de licitación para que el próximo curso el servicio se pueda adjudicar de nuevo.
El Ayuntamiento de Galapagar ha trasladado su apoyo a los trabajadores de la Escuela Infantil El Manantial, que vienen sufriendo retrasos en el pago de sus nóminas por parte de la empresa concesionaria, Atreyu Blota Carto S.L. Solidaridad que hace extensivas a las otras 11 escuelas infantiles de la región que estaban gestionadas por Atreyu y cuyos trabajadores se encuentran en la misma situación.
Este servicio fue licitado hace dos años en concurso público por el anterior equipo de Gobierno. El ganador de la concesión, Atreyu Blota Carto, ha venido realizando el servicio sin ninguna incidencia hasta el mes de enero, que comenzó a retrasar los pagos a los empleados. La dirección del centro trasladó este extremo a mediados de marzo, siempre asegurando que se trataba de algo puntual y que el resto del servicio no estaba sufriendo ninguna merma. Ahora, la empresa concesionaria ha anunciado su intención de declararse en concurso de acreedores.
El Ayuntamiento reitera su firme intención de velar por el buen funcionamiento de la Escuela para que esta fatídica situación no afecte ni al profesorado y, ni por supuesto, a los niños y familias de la escuela. Por todo ello, el Consistorio ha anunciado que exigirá a la empresa Atreyu las responsabilidades oportunas por el incumplimiento del contrato y ha anunciado el inicio de un expediente sancionador. Desde la Concejalía de Educación se ha marcado como prioridad “dar solución a esta situación, con el compromiso de abordar este imprevisto con máxima diligencia con todas las herramientas de las que disponemos desde la administración”.
Posible incumplimiento de contrato
Para poner en antecedentes, es el 13 de marzo de 2024 cuando la dirección de la Escuela Infantil El Manantial traslada, por primera vez, las demoras que han estado sufriendo en los últimos meses los trabajadores en el pago de las nóminas (ahora mismo sufren una demora de nueve días), aunque, según esta misma información, sin ello afectar al resto de funcionamiento de la escuela. El problema es que, aunque el Ayuntamiento en todo momento ha cumplido con el pago a la escuela según el plazo establecido por contrato, la empresa Atreyu no ha cumplido con el pago a sus trabajadores, según indican desde el Consistorio galapagueño. «Todo ello ha derivado en un comprensible malestar del profesorado y dirección de centro, que están sufriendo retrasos en el pago de sus nóminas», indican fuentes municipales.
El Ayuntamiento valora ahora la existencia de un posible incumplimiento de contrato, en el caso de que Atreyu haya incurrido además en una falta de suministros de material escolar, hecho del que hasta ahora no se había tenido conocimiento por parte del Consistorio. Por último, anuncia que ya ha iniciado el proceso de licitación para que el próximo curso escolar pueda adjudicarse el servicio a una nueva empresa y los escolares puedan regresar a las aulas de esta Escuela Infantil con normalidad.