El Ayuntamiento de El Boalo solicita la declaración de Bien de Interés Cultural para el yacimiento de El Rebollar
El 10 de abril comenzó la VI campaña de excavaciones arqueológicas en el yacimiento de la ermita de El Rebollar, en El Boalo, un proyecto que se inició en 2018 en «un lugar lleno de secretos aún por descifrar para el equipo de arqueólogos y antropólogos de la UAM que dirige el estudio de los hallazgos», han señalado fuentes municipales.
Así, todos los grupos políticos del Ayuntamiento de El Boalo, Cerceda y Mataelpino han apoyado en Pleno la solicitud a la Dirección General de Patrimonio la declaración de BIC (Bien de Interés Cultural) de este yacimiento para garantizar su protección y conservación, y también para poder participar en los programas especiales de inversión que se destinan para estos bienes protegidos. Se trata de una categoría que otorgará la máxima protección al mismo «y, en cierto modo, consideramos como un reconocimiento al trabajo que estamos llevando a cabo desde el punto de vista científico», una declaración que se sumaría a su inclusión en el Proyecto Redes de la Comunidad de Madrid, que reconoce las buenas prácticas en el trabajo de este proyecto.
Trabajos de la sexta campaña
Bajo las directrices de Javier Salido Domínguez (Universidad Autónoma de Madrid) y Charo Gómez Osuna (Equipo A de Arqueología) y con el apoyo de la técnico-arqueóloga Elvira García Aragón, durante la primera semana de esta campaña, además de destapar las estructuras localizadas el año pasado, han comenzado a rebajar la capa superficial de las áreas que se van a analizar.
Los objetivos de la presente campaña, financiada por el Ayuntamiento junto con la Universidad Autónoma de Madrid, además de los trabajos financiados por la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid, contemplan la excavación del lugar donde se emplazará el Centro de Interpretación del yacimiento y las pasarelas que conducirán a los visitantes a conocer la excavación.
La superficie a intervenir en esta campaña aumenta respecto al año pasado y ya que se trabajarán en zonas desconocidas hasta el momento. Un nuevo muro en el área sur del cerro advierte de la entidad del asentamiento.
Ya son tres los edificios documentados hasta el momento: la iglesia tardoantigua, que se amplía en época bajomedieval; otro posible edificio de culto de época posterior y uno más al sur, aún no excavado en su interior.
Otro de los objetivos fundamentales es documentar y analizar las poblaciones del pasado de El Boalo para lo que se contará con la colaboración del equipo de antropólogos de la Facultad de Biología de la Universidad Autónoma de Madrid, bajo la dirección de los profesores Armando González y Óscar Cambra, que realizarán los trabajos de documentación, extracción y estudio de los restos óseos encontrados en esta campaña de excavación, siguiendo el mismo procedimiento que el año pasado. Se suman este año dos técnicos de campo, que junto con seis estudiantes en prácticas de la UAM, aprenderán sobre el sistema de excavación y recogida de información de los restos óseos aparecidos.
Además, el Equipo A de Arqueología coordina la participación de todas las personas que de forma voluntaria quieran acercarse y participar de esta apasionante aventura.
«Nuestro interés por difundir los resultados y crear conciencia sobre la importancia del Patrimonio nos anima a seguir contando con la participación directa e indirecta de voluntarios, lo que nos ha brindado la oportunidad de obtener una ayuda del Programa de Fomento de Transferencia de la UAM. El Proyecto, denominado «Convenio UAM-BOCEMA para la inclusión social y cultural de personas con diversidad funcional en un proyecto modélico de Arqueología de Público», dirigido por Javier Salido, lo que nos permitirá dar aún más visibilidad a los resultados de la excavación a colectivos sociales que merecen nuestra atención y a quienes nos dirigimos para la difusión de un verdadero Patrimonio inclusivo conocido y comprendido por todos», han finalizado desde el Consistorio.