Nieves Roses, nueva alcaldesa de Colmenarejo tras prosperar la moción de censura «con 565 días de retraso»

Sumó los votos a favor de PP, AxC, Vox, el no adscrito Jesús Castro y, a última hora, también del portavoz de VeciColme.

Un año y medio después de que se presentase la moción de censura por parte de PP, Alternativa, Vox y el edil no adscrito Jesús Castro, la popular Nieves Roses es desde las 13:00 horas de este lunes la nueva alcaldesa de Colmenarejo, desalojando a Miriam Polo (PSOE), que se quedó un poco más sola en este último pleno, al perder, en el enésimo giro de guión, el apoyo de Vecinos por Colmenarejo, cuyo portavoz y hasta esta misma mañana segundo teniente de alcalde, Juan Fernando López Sevillano, también votó a favor de la moción -aunque numéricamente no era imprescindible para que saliera adelante-, mientras que la número dos de esta formación, Montserrat Palazón, no acudió a la sesión, excusando su ausencia por «motivos personales».

Nieves Roses: satisfacción más de 500 días después

En su primera intervención en el Pleno, Nieves Roses recordó que habían pasado 565 días desde que se presentó la moción de censura, dilatándose en el tiempo su convocatoria hasta que las dos últimas sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Madrid volvieron a dar la razón a los grupos que registraron esta iniciativa el 29 de julio de 2021. La ya regidora colmenarejana, que ya estuvo al frente del Ayuntamiento durante dos legislaturas, quiso recordar a Justo Lozano, concejal del PP que fue uno de los firmantes de la moción y falleció semanas después de su presentación.

La moción de censura sumó los votos del PP, Alternativa, Vox, el edil no adscrito Jesús Castro y -en un inesperado giro de última hora- el del portavoz de Vecinos, Juan Fernando López Sevillano, que hasta esta misma mañana formaba parte del equipo de Gobierno que encabezaba Miriam Polo (PSOE)

Roses agradeció el apoyo de los concejales que, pese a las dificultades, han seguido adelante con la moción: «En ningún momento hemos aflojado», enfatizó, para añadir que lo más importante «son los vecinos». «No voy a entrar en descalificaciones, porque no me gusta el barro, entre otras cosas porque he estado en el mismo puesto que la todavía alcaldesa», dijo.

Respecto a las razones para presentar la moción de censura, se remitió al texto que figuraba en su presentación, en el que se hablaba de caos, incapacidad, mala gestión, problemas de personal, falta de participación, opacidad, pérdida de las inversiones del PIR y discrepancias en el uso del remanente de tesorería, con proyectos como la compra de una nave en el polígono industrial por más de 500.000 euros que el PP, así como el conjunto de la oposición, consideraba innecesaria.

Nieves Roses (PP), tras recibir el bastón de mando de manos de Miriam Polo (PSOE) / Fotografías: Rafa Herrero

El aplauso inesperado

Fue al finalizar la intervención de Nieves Roses cuando se pudo ver un gesto que anticipaba la sorpresa que se viviría minutos más tarde en el momento de la votación. Entre quienes aplaudieron a la portavoz popular estaba también el segundo teniente de alcalde y durante buena parte del mandato ‘mano derecha’ de Miriam Polo, Juan Fernando López Sevillano, quien curiosamente hace unos días remitió a este medio una carta criticando duramente a los firmantes de la moción de censura y, muy especialmente, a la ya alcaldesa, de la que llegaba a decir en el mencionado texto, publicado en Aquí en la Sierra el pasado 26 de enero, que «su odio y su único deseo de poder han sido como un brebaje mágico para volver a atacar».

En su intervención, López Sevillano se limitó a decir que su partido seguirá trabajando por Colmenarejo, abandonado más tarde el salón de plenos de forma precipitada en cuanto se procedió a la votación, mientras entre el público se multiplicaban los comentarios sobre su cambio de postura.

Fernando Arribas (Alternativa): «Un daño tremendo»

Fernando Arribas, de Alternativa por Colmenarejo (formación que no se presentará en las elecciones de mayo, tras haberse integrado en Más Madrid), manifestó que la moción de censura, «paralizada durante un año y medio», se presentó por «razones que eran evidentes en su momento y lo siguen siendo ahora, porque la situación ha ido empeorando». «Ha hecho un daño tremendo a Colmenarejo», dijo el edil sobre el mandato de Miriam Polo, de modo que el Ayuntamiento se encuentra en un estado «sumamente delicado». En este contexto, indicó, el nuevo Ejecutivo deberá corregir lo que se pueda en el poco tiempo que queda hasta las elecciones (apenas tres meses y medio), «a la espera de un gobierno estable que vele por los intereses de los vecinos y por el bien común».

Guadalupe de la Fuente (Vox): «Una decisión de extrema necesidad»

Después, Guadalupe de la Fuente, concejal de Vox, señaló que se trataba de «un día histórico», al ser la primera moción de censura que se debatía en la localidad, decisión que calificó como «de extrema necesidad por su actitud e ineptitud». Lamentó también las trabas que el equipo de Gobierno saliente había puesto a la labor de la oposición, recordando casos como el de la convocatoria del pleno para aprobar el remanente de tesorería apenas unos días después de que hubiese fallecido un concejal del PP, sin tiempo para que el siguiente en la lista, Fernando Juanas, hubiese tomado poesión de su acta. «Fue algo inmoral», manifestó la edil, reprochando igualmente la «falta de corrección y educación de la alcaldesa» y la nula de capacidad del Ejecutivo para aprobar un solo presupuesto en cuatro años «a pesar de haber contratado a una empresa externa para su elaboración». Con la moción, añadía, se trata de «anteponer el bien común por encima de ideologías e intereses partidistas», añadiendo en último término que «no es un cheque blanco».

Jesús Castro (no adscrito), a la derecha, y Juan Fernando López Sevillano (Vecinos), en el momento de votar a favor de la moción de censura contra Miriam Polo / Fotografías: Rafa Herrero

Jesús Castro: «No han podido con nosotros»

Por su parte, el concejal no adscrito Jesús Castro -que inicialmente ocupó el puesto número 4 de la candidatura socialista en 2019, aunque en ningún momento llegó a formar parte del grupo municipal- fue quien con mayor dureza se empleó contra la ya ex regidora y su equipo de Gobierno, recordando en primer lugar que una edil del PSOE renunció cuando se aprobó «el decreto de la vergüenza, con una subida de sueldo de 14.000 euros para la alcaldesa». Desde entonces, lamentó, y a pesar de las diferencias existentes en el seno de la Agrupación Socialista, «nadie del PSOE de Madrid se ha puesto en contacto conmigo». Ante estos hechos, relató, decidió tomar posesión como «no adscrito», algo de lo que dejó constancia de forma expresa, denunciando de nuevo el «retraso inaceptable de 18 meses» en la convocatoria de la moción. En este sentido, reprochó las trabas de la entonces alcaldesa, Miriam Polo, pero también del secretario municipal en acumulación. «No han podido con nosotros, por mucho que lo hayan intentado, incluso con denuncias falsas», aseguró, para continuar diciendo que ha estado afiliado al PSOE «durante 22 años» y que a su juicio durante esta legislatura «no se ha hecho ningún tipo de política del PSOE».

Miriam Polo (PSOE) habla de «bajeza política»

En cuanto al equipo de Gobierno, una vez consumada la espantá de VeciColme, los apoyos se redujeron a los de Itziar Pérez, de Unidas Podemos, quien indicó que llevaba en el Ejecutivo solo desde agosto (tras la renuncia de Marga Cuervo), pero que «estaban satisfechas de lo que hemos podido hacer». También votó en contra de la moción el no adscrito Juan José Díez (antes en Ciudadanos), en tanto que la ya ex alcaldesa, Miriam Polo (PSOE), dedicó buena parte de su intervención a hacer balance de las actuaciones desarrolladas desde junio de 2019. Además, acusó a la oposición de actuar con «bajeza política, falta de respeto y obstrucción de la actividad del Gobierno», especialmente a raíz de la dimisión de los dos concejales de Alternativa por Colmenarejo en marzo de 2020. «Solo les interesa el poder», manifestó, para terminar diciendo que se iba “con la cabeza alta” y que -pese a haber puesto sucesivos recursos para retrasar la convocatoria de la moción de censura- cedía «desinteresadamente» el bastón de mando, esperando que la nueva alcaldesa se mantuviera su «mismo sueldo, que es el salario mínimo interprofesional».

Miriam Polo, ya ex alcaldesa de Colmenarejo / Fotografías: Rafa Herrero

Terminadas todas las intervenciones, se procedió a la votación de la moción de censura, con ocho votos a favor (tres del PP, dos de Alternativa por Colmenarejo, uno de Vox, un no adscrito -Jesús Castro- y uno de Vecinos) y solo cuatro en contra (dos del PSOE, uno de Podemos y un no adscrito -ex de Ciudadanos-).

Finalizado el Pleno, el secretario general del PP de Madrid y portavoz popular en la Asamblea, Alfonso Serrano, que acudió hasta Colmenarejo para mostrar el apoyo del partido a Nieves Roses, indicó que la moción de censura llegaba «con más de 500 días de retraso». «Durante este año y medio lo único que se ha hecho, por desgracia, es perder el tiempo. Ahora se trata de gestionar este municipio durante los tres meses que quedan de legislatura», manifestó, destacando que «la experiencia de Nieves da garantía a los vecinos de que el Ayuntamiento no se va a parar», hasta que en las elecciones del 28 de mayo sean los colmenarejanos los que «hablen con su voz y con su voto, y determinen cuál es el futuro de este municipio».  «Se cumple la voluntad de los vecinos, porque además es una moción que ha salido con más votos que el número de firmantes, lo que demuestra que hacía falta ante la inacción de este gobierno y que no es cuestión de un solo partido político, sino que hacía falta un cambio», concluyó, lamentando que el PSOE se haya aferrado durante todo este tiempo al poder, algo que para Serrano «dice muy poco del talante socialista».

Estudiar las prioridades

Por su parte, la ya alcaldesa, Nieves Roses, señaló que ahora lo primero que hará es sentarse para «ver cuáles son las prioridades que tiene este Ayuntamiento». «A corto plazo, a lo mejor están las bases del próximo presupuesto, que sería una de las cosas más importantes, puesto que se ha estado gobernando con presupuestos prorrogados desde 2018», adelantó, refiriréndose también a proyectos como el preacuerdo para construir viviendas públicas en terrenos de la Universidad Carlos III, al que hizo referencia Miriam Polo en su intervención: «Habrá que comprobar en qué términos se han hecho y de qué forma». «La experiencia de haber estado gobernando ocho años en minoría nos da mucha cintura, y espero que esa cintura no se pierda», añadió.

Nieves Roses, sobre el cambio de postura de Fernando López Sevillano (VeciColme): «Lo tendría que analizar»

Preguntada por el sorprendente apoyo de Juan Fernando López Sevillano, portavoz de Vecinos, dijo que su voto «todavía lo tendría que analizar; habrá que ver cuáles son las circunstancias de ese voto, porque es una persona que representa a un partido que durante nuestras dos legislaturas nos estuvo apoyando y que en cambio en ésta decidió apoyar al PSOE». Además, Roses aseguró que no conocía previamente este cambio de postura: «Hace poco había hecho unas declaraciones sobre mí un poco especiales… pero bueno, como dice el refrán, rectificar es de sabios, y si la sabiduría le ha venido a última hora, bienvenida sea», afirmó, en referencia a la carta publicada por el edil de Vecinos hace apenas 10 días en Aquí en la Sierra en la que cargaba contra los impulsores de la moción de censura y de forma muy especial contra la propia Nieves Roses.

Respecto a la estructura del nuevo Ejecutivo, indicó que en estos tres meses hasta las elecciones municipales la idea es «gobernar en solitario, pero siempre contando con las personas que han estado apoyando la moción, porque creo que se ha creado un vínculo que es importante; partidos muy distintos hemos estado juntos 565 días y eso significa que hay un entendimiento entre todos nosotros, y no lo quiero perder, porque soy una mujer de consenso y negociación».

El secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano, junto a la vicesecretaria de Organización y Territorial, Ana Millán, asistieron al Pleno extraordinario de moción de censura. También estuvieron, entre otros, la alcaldesa de Collado Villalba, Mariola Vargas; el regidor de Los Molinos, Antonio Coello; la candidata del PP en Galapagar, Carla Greciano; o el portavoz popular en Torrelodones, Arturo Martínez Amorós. En cuanto a los representantes del PSOE, las cara más conocidas eran las de Alberto Gómez, alcalde de Galapagar y coordinador socialista en la zona Noroeste, y Javier Guardiola, diputado en la Asamblea de Madrid y portavoz de Juventud, que en su cuenta de Twitter afirmaba que «hoy dos militantes de Más Madrid han hecho una moción de censura junto con PP y Vox a la alcaldesa socialista de Colmenarejo, una de las más jóvenes de toda la Comunidad».

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