Los casos de absentismo escolar en Collado Villalba se reducen a la mitad en cuatro años
La alcaldesa de Collado Villalba, Mariola Vargas, ha hecho público esta mañana el informe elaborado por la Mesa Local de Absentismo Escolar del curso 2015-2016, que cifra en 26 los casos de menores que faltan con asiduidad y sin justificación a las clases. Una cifra baja si tenemos en cuenta que la población escolar del municipio supera los más de 7.000 alumnos. En España, la escolaridad es obligatoria para los niños entre los 6 y los 16 años.
De estos 26 casos, 11 corresponden a alumnos de Educación Primaria y 15 de Secundaria. «El absentismo es multicausal. En los más pequeños se suele dar por enfermedades, sin embargo, en los jóvenes de Secundaria suele haber muchas más causas», ha explicado la regidora, quien ha subrayado el trabajo conjunto de varias concejalías como Servicios Sociales y Educación, además de los propios centros escolares, el servicio de Policía de Menores y el DAT (Delegación de Área Territorial Madrid-Oeste).
Vargas ha hecho especial hincapié en el trabajo de la Policía de Menores, entre cuyas muchas funciones se encuentra «dar paseos por los parques y zonas de reunión de los jóvenes» o «acompañar al menor al colegio en caso de problemas familiares».
El perfil de las familias donde se suele dar el absentismo es que son de nacionalidad española y «no acaban de entender que sus hijos tengan que estar escolarizados. Muchas veces es la primera pista de que en la familia puede ocurrir algo, que puede haber una crisis como un divorcio».
Reducción de los casos
Desde que la Mesa Local de Absentismo Escolar de Collado Villalba se estructurase tal y como está ahora en 2012, cuando el papel de Servicios Sociales se hace más patente, se ha reducido de 40 a 26 los casos. «Muchos casos se han cerrado porque los niños se han ido con sus familias a estudiar a otros países o porque al cumplir los 16 años la escolaridad deja de ser obligatoria».
El objetivo de esta entidad es prevenir el absentismo, de ahí la importancia de dar la información a las familias, «explicarles la importancia de que sus hijos vayan al colegio» a través de charlas en la Escuela de Familia. Esta iniciativa que apuesta por conseguir la escolarización plena de los menores del municipio, como una herramienta más para proteger el derecho a la educación y alcanzar la igualdad de oportunidades y la integración social.
Durante el pasado curso, tras la derivación e intervención por parte de Servicios Sociales, se ha producido una notable reducción de faltas de asistencia de alumnos a los centros. De igual forma se ha experimentado un aumento de la aceptación general sobre la obligatoriedad de la asistencia a clase hasta la edad correspondiente.
Mariola Vargas ha destacado “el esfuerzo y la colaboración prestada por parte de los diferentes profesionales implicados en la lucha contra el absentismo escolar” y ha explicado que “la acción coordinada de las diferentes instituciones permite mejorar considerablemente las situaciones de riesgo social de los menores y supone una mayor motivación para seguir trabajando en un ámbito muy complejo”.
