El equipo de Gobierno de Collado Villalba estudia eliminar los semáforos de la intersección de la calle Real con Honorio Lozano y Batalla de Bailén

El concejal de Tráfico y Seguridad del Ayuntamiento de Collado Villalba, Miguel Aisa, ha encargado un informe técnico al subinspector de Tráfico de la Policía Local “sobre la ideoneidad de mantener los semáforos” que regulan la circulación en la intersección de la calle Real con Batalla de Bailén y Honorio Lozano.

Estas señales lumínicas dejaron de funcionar el pasado jueves 6 de octubre, cuando una subida de tensión inhabilitó el sistema que los controla. “Fallaron todos los semáforos de la calle Real y se reactivaron todos, pero esos no. Estuvo la empresa que se encarga de su mantenimiento, junto con varios agentes de la Policía Local, y después de examinarlos nos dijeron que la placa reguladora, la que hace que todos los semáforos de esa plaza estén sincronizados, se había quemado”, ha explicado Aisa.

40 años de antigüedad

Se trata del mayor grupo de semáforos con los que cuenta el municipio -está compuesto por 13 señales- que tienen más de 40 años de antigüedad por lo que no existen piezas de repuesto y habría que fabricarla ‘ex profeso’, un proceso que podría alargarse un par de semanas. “La tienen que hacer en un sitio concreto; tienen que parar lo que estén haciendo para hacer esa placa, lo que supone una cantidad importante de dinero”, añade Aisa, que asegura que la opción de reparar estos elementos se ha desechado por parte del equipo de Gobierno.

Por ello, desde Seguridad y Tráfico se había planteado la posibilidad de sustituir estos semáforos por otros más modernos. “Hemos pedido también presupuesto. ¿Hasta qué punto una buena administración del dinero de los ciudadanos gastaría ese dinero en algo que tiene más de 40 años y no en unos nuevos?”, se pregunta el concejal. Estos nuevos elementos, que estarían disponibles en un par de meses aproximadamente (ya que implica obra civil), incluirían un marcador con los segundos que restan para que cambie de color la señal lumínica, lo que aumenta la seguridad de conductores y peatones.

¿Son necesarios?

Sin embargo, el equipo de Gobierno también se plantea eliminar definitivamente este grupo semafórico. “Desde que se han averiado han surgido voces que plantean la posibilidad de que igual en una rotonda, con señalización horizontal para el paso de peatones, no es necesario un semáforo”. Por ello, han encargado un informe técnico al subinspector de Tráfico, “que dirá si es idóneo o no proceder al cambio o se pueden retirar los mismos porque no se consideran necesarios”.

“A falta de una señal luminosa, la normativa, tanto la Ley de Seguridad Vial como el Reglamento de Tráfico, dice que si llegas a un paso de peatones tienes que frenar y si llegas a una rotonda tienes que ceder el paso a los vehículos. Me han planteado porqué no pongo policías para vigilar en esa zona, pero hablando con los responsables de la Policía, que son los que saben de esto, dicen que no ven necesidad real de ello”, señala Aisa quien asegura que en estos días no se ha producido ningún incidente en esas calles.

Por su parte, el Partido Socialista de Collado Villalba ha pedido una solución a la situación que desde hace días vive el tráfico de esta zona. “Dejaron de funcionar el pasado 6 de octubre. Cuando conocimos la incidencia, y en un ejercicio de Oposición responsable, consultamos con el concejal de Seguridad, dando tiempo y margen suficiente para que se encontrase una solución”, han señalado los socialistas a través de las redes sociales. “Habiendo descartado la sustitución de la placa reguladora por ser un modelo que ya no existe en el mercado y sin visos de una solución temprana, desde el PSOE solicitamos la sustitución de los semáforos con urgencia. Si dicha reposición necesitase de financiación extraordinaria por falta de presupuesto, desde este grupo municipal apoyaríamos con nuestro voto a favor una partida de crédito extraordinario”.

En cuanto a la posibilidad de que la empresa que encarga del mantenimiento de los semáforos se haga responsable de la sustitución de esta pieza, el concejal explica que “el principio de riesgo y ventura dice que cuando las empresas se meten en un contrato tienen que asumir que a veces se gana y a veces se pierde. Esta empresa suele reponer todas las piezas, pero ésta en concreto excede con creces el contrato anual que tiene el Ayuntamiento con ella, que es de unos 5.150 euros, por lo que va más allá del principio de riesgo y ventura”.