Collado Mediano: legado romano, naturaleza y gastronomía a 30 minutos de Madrid

Collado Mediano está ubicado en un entorno natural privilegiado, con vistas a gran parte de la Sierra de Guadarrama. Si por algo destaca es porque en él se encuentra la única mansio o posada romana de Europa excavada, documentada y vinculada a una calzada romana que está a disposición del público como atracción patrimonial turística. Estos restos arqueológicos, que datan de los siglos II-V y se identifican como Miaccvm, fueron declarados Bien de Interés Cultural (BIC) en 2012.

La posada, cuyos restos se ven en el yacimiento, daba servicio a la Vía XXIV del “Itinerario de Antonino”, una calzada romana secundaria con origen en Titulcia, rama de una ruta principal que unía Emérita (Mérida) con Caesar Augusta (Zaragoza).

La vía en la que está ubicada la mansio collaína cruzaba la Sierra de Guadarrama por el puerto de La Fuenfría y era un alto en el camino para el viajero que se disponía a emprender el último tramo o que acababa de pasar la cumbre. Un lugar para reponer fuerzas con una buena comida o un baño caliente, descansar y conversar con otros transeúntes.

El edificio se articulaba en torno a un patio central, con habitaciones para huéspedes y salas comunes en el ala norte y el conjunto termal en el ala sur. De éste se conservan el caldarium (sala caliente), el tepidarium (sala templada) y el frigidarium (sala fría), al igual que un torreón que pudo haber sido sala de masajes. Estas estancias estaban calefactadas por un horno exterior, formando parte del sistema de calefacción conocido como hypocaustus. En el este de la posada también pudo haber construcciones anejas que hicieran función de cocina, almacén, granero y establos.

Un entorno privilegiado

Aunque esta joya arqueológica es el mayor tesoro del pueblo, Collado Mediano ofrece mucho más. La naturaleza es otra de sus señas de identidad. Flanqueado en la parte alta por Peña Rubia, Cabeza Mediana y la Sierra del Castillo -donde se encuentra el monumento rocoso natural conocido como La Cobañera-, la parte más baja del pueblo ofrece zonas adehesadas con fresnos centenarios, robles, encinas, alcornoques y multitud de sendas que ansían ser exploradas tanto a pie como en bicicleta o a caballo.

Este entorno natural también permite observar corzos, jabalíes o zorros en la zona del Cerro del Castillo; milanos reales planeando mientras buscan pequeñas presas; águilas calzadas; buitres leonados o, si el visitante es afortunado, buitres negros. Más habituales son pájaros como los pinzones, escribanos, collalbas, herrerillos, totovías, currucas, carboneros, pájaros carpinteros, así como unas 50 especies diurnas de mariposas y un número mucho mayor de nocturnas.

Ocio y gastronomía

Otro atractivo de este municipio son sus fiestas, muy populares en la Comunidad de Madrid. El 23 y 24 de enero los collaínos honran sus tradiciones con las de San Ildefonso y Nuestra Señora de la Paz. La llegada del buen tiempo se celebra con la Cruz de Mayo y su romería, en la que hay bailes, canciones y comida campestre con el tradicional guiso de patatas con carne como protagonista. El apogeo llega en verano con los fastos por el Santísimo Cristo de la Caridad, seis días con planes para todas las edades.

Si lo que se busca es una experiencia gastronómica, nada como deleitarse con la gran oferta local, en la que las carnes y los quesos de la Sierra ocupan un lugar destacado. Y para recuperar fuerzas, el pueblo cuenta con una gran variedad de alojamientos en los que hacer noche y descansar antes de comenzar una nueva jornada repleta de posibilidades: deporte al aire libre, tiro con arco, rutas a caballo, clases de hípica, rutas micológicas, conciertos, exposiciones, teatro o incluso una velada de observación astronómica.

Los romanos eligieron Collado Mediano por su riqueza natural y su enclave privilegiado. Aquí comieron, descansaron, tomaron las aguas, convivieron… Descubre los encantos de este pueblo. Que sea también tu posada.

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