Carlos Saura ya tiene su teatro en Collado Mediano

Desde el sábado, el Teatro Villa de Collado lleva el nombre del cineasta, fotógrafo y escritor Carlos Saura (1932-2023), que además también ha sido nombrado de Hijo Adoptivo de este municipio, donde vivió casi 30 años. Su pareja, Eulalia Román, agradeció en nombre de la familia el gesto de la Corporación, que con su apoyo unánime reconoce la labor de un artista y un legado que ha traspasado las fronteras de Collado Mediano a escala internacional. 

«Carlos estaría ilusionado, encantado de la vida; él era feliz en Collado Mediano», ha reconocido su viuda, quien ha desvelado que «en sus últimos años, Carlos hizo bastantes obras de teatro, por lo que estaría feliz con que el Teatro de Collado llevara su nombre». «Yo estoy muy emocionada con esta iniciativa y de que la hayan puesto tanta ilusión como estoy notando. Lo único, que me da mucha pena que no haya sido en vida de Carlos, porque le hubiera gustado colaborar».

Por su parte, la alcaldesa, María Sierra Serrano, ha recordado que «para nosotros es un honor y un placer el haber tenido como vecino a Carlos Saura. Para él, Collado Mediano era su refugio, su vida. Aquí tuvo a su familia y aquí ha vivido como un vecino más; le veías en el estanco, cogiendo el tren… Te le encontrabas en el autobús, te sentabas con él y conversabas con él como con cualquier vecino. Eso a él le gustaba mucho, la cercanía y hablar con los vecinos, aunque era tímido». 

Fundación Carlos Saura

«La idea es que podamos seguir colaborando, que no se quede en el nombre del Teatro y ya está, sino que sea un generador de actividades culturales. Nosotros tenemos intención de hacer una ‘Casa Carlos Saura’ con residentes, mantener su legado, hacer muchas actividades de distintas disciplinas, crear sinergias entre el Teatro y la Casa, que sean centros donde se puedan hacer talleres de pintura, dibujo, cine, pase de cortos, coloquios… Tenemos un potencial muy grande, un gran motor cultural», ha avanzado Eulalia Román. «El quería que su casa fuera un centro cultura y que la gente pudiera visitarlo. Su casa está como él la dejó, con su biblioteca y todas sus pertenencias».

«Su casa es un museo, tiene su vida allí y su familia quiere promover una Fundación con actividades culturales, donde se puedan ofrecer becas a estudiantes que quieran venir a hacer cortometrajes o proyectos fotográficos y estaremos encantados de que puedan contar con nosotros y poner el nombre de Collado Mediano en el mundo, como hizo Carlos Saura», ha admitido la regidora, María Sierra Serrano. 

Collado Mediano, ejemplo a seguir

Eulalia Román ha subrayado el hecho de que esta decisión se tomará por unanimidad de todos los grupos municipales del Consistorio, con independencia de la ideología política que representan. Prueba de ello es que en la presentación del proyecto, junto a la alcaldesa, María Sierra Serrano, y la edil de Cultura, Eva Márquez, estaba el concejal del Partido Socialista, César García. García, que recordó que su primera boda como concejal la había celebrado para Manuel, el hijo de Carlos Saura, señaló que «solo por cosas como estas ya merece la pena ser concejal». 

Por su parte, la regidora ha reconocido que «en esta legislatura estamos intentando ponernos de acuerdo y lo estamos consiguiendo, simplemente hay que ser tolerante, escuchar y poder llegar a un punto en común y por eso podemos seguir haciendo cosas y avanzando».

«Es un ejemplo; sería fantástico que todos los municipios siguieran el ejemplo de Collado Mediano de estar por encima de las ideologías y juntarse, trabajar y consensuar más para la sociedad y no las peleas entre ellos», ha dicho Eulalia Román, que ha hecho referencia al fallido cambio de nombre de la plaza Francisco Rabal y de la Casa de Cultura Asunción Balaguer en Alpedrete, donde ella acudió a la concentración convocada contra esa decisión del equipo de Gobierno de PP y Vox. «Yo estuve por la vinculación que tenía con Paco y Asunción y al menos se consiguió que rectificaran, pero es muy penoso llegar a este punto. Me parece que la cultura está por encima de ideologías y lo que hay que valorar es el legado cultural y humano que nos han dejado».