La obligada reinvención de la hostelería

Los restaurantes recurren al servicio a domicilio antes las limitaciones impuestas por la pandemia

La crisis del coronavirus está obligando a muchas empresas a reinventarse para salvar sus negocios. Uno de los sectores más golpeados por la pandemia ha sido el de la hostelería, como consecuencia de los cierres y limitaciones de aforo y horarios de apertura. Por ello son muchos los que buscado nuevas alternativas y ofrecen el servicio a domicilio o para llevar.

Así lo cuenta Francisco González, de Paco Pastel (San Lorenzo de El Escorial): “Desde el primer día tuvimos servicio a domicilio hasta para llevar el pan a nuestros clientes para intentar seguir trabajando”. Esto ha supuesto más trabajo y un incremento de costes, señala, “pero había que seguir adelante”, poniendo en marcha una especie de delivery con el que te llevan a casa cualquiera de sus productos.

Eduardo Bada, del restaurante Al Punto Hambgourmet (San Lorenzo de El Escorial), explica que, dado que el suyo es un local pequeño, “al tener que reducir el aforo a la mitad tenemos muy pocas mesas; notamos un incremento en la gente que venía al local a recoger, porque hay gente que no quiere ir a sitios cerrados”. Además, debido a la demanda han incorporado el servicio a domicilio, que lo tienen contratado con una empresa local, que precisamente se ha creado a raíz de la pandemia.

También en San Lorenzo de el Escorial, Miguel San Juan Canales, de La Oficina Bistro, señala que “después del confinamiento y empezando en la nueva normalidad, tuvimos que reinventarnos para poder atender a nuestros clientes y amigos, y poder ofrecerles una nueva carta con productos frescos y proveedores de cercanía, para apoyar al comercio local y actualizarnos con las plataformas digitales y redes sociales, facilitando el acceso a las nuevas propuestas gastronómicas”.

Su ‘take away’ está siendo todo un éxito en San Lorenzo: “A día de hoy seguimos manteniendo este servicio con ofertas y descuentos, como por ejemplo los combos, que te permiten pedir más, por menos. La gente puede acceder a nuestros contenidos y cartas digitales desde sus dispositivos móviles”.

En Torrelodones, el Restaurante Olive se está preparando de cara a las fiestas de Navidad. Marcus Diaque avanza que va a ofrecer propuestas especiales para disfrutar con la familia en sus hogares. “Menús sencillos de emplatar y pensados para ofrecer la mejor calidad y las elaboraciones más originales para sorprender a propios y extraños” señala.

Las circunstancias obligan a adaptarse a la nueva situación, pero sin tener que renunciar a la buena comida: “Estas Navidades sólo cambiará el ambiente, más hogareño pero con las mejores delicatessen”, señala. Para ello, sólo tienes que pedir tu menú directamente a través de la web www.oliverestaurante.com.

En el Asador Mariano (Moralzarzal) también ha tenido que ajustarse a la nueva normalidad, y además de las medidas impuestas de separación entre mesas y limitación de aforo, han reforzado su servicio de comida para llevar. Un servicio que les ha supuesto un gasto extra (“no es lo mismo emplatar en el local que tener que prepararlo en recipientes específicos con tapas herméticas”, explican), de modo que a la paella y los tradicionales asados de cordero y cochinillo se ha añadido toda la carta.

También en Guadarrama saben bien que es reinventarse. Después de tres meses de confinamiento y restricciones de movilidad, donde no se podía ni salir ni entrar del municipio, había que buscar la manera de llegar a la clientela. Para ello se puso en marcha una herramienta que permite hacer la compra online a través de Whatsapp. Una iniciativa que han impulsado una treintena de comercios y restaurantes: “Si nuestros clientes no pueden venir a nuestro restaurante, nosotros se lo llevamos envasado al vacío y listo para comer”, explica Francisco Jiménez, del Restaurante Torreblanca.

La empresa Prados Moros, cuya finca está situada en Guadarrama, ha sufrido especialmente la pandemia. Según indica su responsable, Ana Sánchez, “si la crisis ha afectado especialmente al sector de la hostelería, sus consecuencias han sido aún más duras para las bodas y los eventos, nuestra actividad principal”. Tras el disgusto previo, continúa, “llegan las ganas de salir adelante y seguir disfrutando, con todas las medidas de seguridad, de la gastronomía. Hemos creado dos proyectos en los que hemos depositado toda nuestra ilusión y esperanzas”.

El primero de ellos es En Petit Comité (www.clubenpetitcomite.com), un club gastronómico que organiza diferentes eventos en los que los clientes pueden disfrutar de un día en el campo acompañados de la mejor gastronomía.

Y para quienes prefieren quedarse en casa, nace Migas y Amigos (www.migasyamigos.com), un delivery semanal en el que pueden disfrutar de platos gourmet hechos con mucho amor, con los que quedar como un auténtico chef con tus invitados. Nosotros cocinamos y los clientes disfrutan”.

Finalmente, desde un local más acostumbrado al servicio a domicilio, Telepizza, en El Escorial, señalan que también vivieron momentos de incertidumbre las primeras semanas del confinamiento: “Parecía que se había acabado el mundo, fue muy complicado, pero poco a poco la cosa fue volviendo a su cauce”. “Hemos bajado en el local y ha subido el reparto a domicilio, por lo que ha habido que reforzar la contratación para el transporte”, detallan sus responsables.

Send this to a friend