Contador – Serrano, un ‘pique’ a golpe de récord en la Bola del Mundo

La Sierra del Guadarrama se ha convertido en las últimas semanas en escenario no sólo de durísimos entrenamientos, sino también de piques en el ámbito de redes sociales como la norteamericana Strava, que han logrado captar la atención de un buen número de aficionados al ciclismo en pleno parón de la competición por la crisis sanitaria. Lo más sonado se ha centrado en el duelo por el KOM (denominación en siglas de los segmentos en subida de la aplicación Strava, que significa King of the Mountain, traducido en Rey de la Montaña) de la subida a la Bola del Mundo entre dos madrileños: Alberto Contador, doble campeón del Tour de Francia y ganador de siete grandes vueltas, y Gonzalo Serrano, profesional del Caja Rural y compañero del galapagueño Sergio Román Martín en la escuadra navarra. 

Gonzalo Serrano fue el primero en poner su pica en la cima pavimentada más alta de la Sierra: el 23 de junio paró el cronómetro en 14:04 minutos, tiempo invertido en los 3,2 kilómetros de subida que unen el Puerto de Navacerrada con la Bola del Mundo por una pista de hormigón que presenta rampas de más del 20%, a una media del 12%. Apenas cinco días después, Alberto Contador se presentó en la Bola con su bicicleta A Bikes, rompió la barrera de los 14 minutos y dejó el récord del KOM en 13:49, subiendo a una media de 13,5 Km/h. La irrupción del campeón de Pinto en el Strava del segmento de la Bola propició que su duelo con Serrano se conociese a nivel nacional, con los principales diarios deportivos destacando su gran momento de forma, pero también suscitando críticas en determinados foros ciclistas, en los que se especuló con la posibilidad de que Contador hubiese manipulado de alguna forma su tiempo. Las sospechas crecieron aún más después de que el pasado 11 de julio Gonzalo Serrano pulverizase el récord de Contador con una rebaja de 33 segundos, hasta dejarlo en 13:16 minutos. 

Denuncia en Strava

Lo último sobre el pique entre los dos ciclistas madrileños es que Alberto Contador podría haber denunciado en Strava posibles irregularidades en el nuevo récord de Gonzalo Serrano, según una información recogida en el Diario de Navarra. Más allá de ese particular, en el fondo subyace la credibilidad de unos registros que son susceptibles de ser manipulados, en opinión de no pocos usuarios de la aplicación con sede en San Francisco.

En Strava se han dado casos de récords marcados con vehículos a motor, o directamente producto de la manipulación de los ficheros o de los hackeos, de ahí que la aplicación, con función también de red social, tenga habilitada la posibilidad de denunciar para depurar al máximo sus tablas de tiempos, basadas en el GPS. Toda la polémica ha generado un sinfín de debates con tres protagonistas: Contador, Serrano y la Bola del Mundo. Pero para muchos, los grandes beneficiarios de todo el revuelo son dos herramientas: la propia aplicación Strava, necesitada de promocionar su cuenta Premium de pago tras incluir en ella uno de sus servicios más utilizados, como es la posibilidad de ver la tabla de tiempos de cada segmento; y la publicidad de A Bikes, la marca de bicicletas de Contador. 

El Everesting de Contador 

Más allá del intercambio de récords en la Bola del Mundo, la Sierra del Guadarrama sigue siendo un gran banco de pruebas para Alberto Contador, cuyos entrenamientos desde juveniles -inauguró su palmarés en el desaparecido Gran Premio de Colmenarejo-  la han tenido como escenario en innumerables ocasiones. A pesar de llevar tres años retirado como profesional, Contador ha venido realizando en ella varias sesiones de entrenamiento muy llamativas en las últimas semanas.

El 3 de julio ascendió seis veces seguidas el Puerto de La Morcuera por su vertiente más exigente, la de Miraflores de la Sierra, y ese hito -destacable en un ciclista que ahora es un simple aficionado- lo condujo a llevar a cabo el reto Everesting Challenge, que consiste en acumular el desnivel positivo equivalente a la altura del Everest, que es de 8.848 metros. Contador, alentado por los aficionados en las redes sociales, y también ante el deber de probar nuevos materiales de su marca, aceptó el reto y lo llevó a cabo en la subida a Navapelegrín, en las inmediaciones de la Pradera de Navalhorno, vertiente segoviana del Puerto de Navacerrada. Allí, el campeón pinteño subió 78 veces seguidas un tramo de un kilómetro a casi el 12% de pendiente media, escogiendo la parte más dura de una ascensión que, completa, tiene una longitud de 6,5 kilómetros. Los datos del Everesting de Contador fueron 7:33:37 horas invertidas para cubrir 148,71 kilómetros, en los que salvó 8.964 metros de desnivel. 

En la Sierra, el último precedente de Everesting documentado y promocionado fue realizado el 1 de julio de 2017 por el donostiarra Mikel Azparren en el Alto del León, al subir 17 veces el puerto desde la plaza de Guadarrama. El ciclista vasco sumó un desnivel de 8.950 metros y estuvo más de 12 horas sobre la bicicleta.

Alejandro González, récord en la Fuenfría

Pero los KOM de Strava no son coto exclusivo del ciclismo. La aplicación, utilizada también por nadadores y triatletas, tiene mucho predicamento en el atletismo, donde es la herramienta más utilizada por los profesionales. Uno de los grandes atletas serranos, Alejandro González de Miguel, pulverizó el pasado 14 de julio el récord de la subida al Puerto de la Fuenfría, marcando un tiempo de 39:50 minutos en los nueve kilómetros a una media del 5% de desnivel que unen Cercedilla con el histórico enclave de montaña que separa Madrid de Segovia por la carretera de la República. El sanlorentino pasó a liderar la tabla de tiempos de Strava, con 1:36 minutos de ventaja sobre el madrileño del Bathco Running, Edu Callejo, y se erigió en el único atleta capaz de bajar de los 40 minutos en ese popular segmento serrano.  

Jaime Fresno