La campaña «Báñate por la esclerosis múltiple» anima a mostrar en redes el apoyo y a seguir colaborando
Mojarse por la esclerosis múltiple, de forma literal o solidaria, podrá ser posible gracias a la nueva campaña “Báñate por la Esclerosis Múltiple” puesta en marcha por la Asociación ADEM Collado Villalba. Una iniciativa diferente a la de otros años en la forma pero no en el fondo, el de apoyar a todas las personas afectadas por la esclerosis y a sus familias.
Una iniciativa que se realizará a través de redes sociales Instagram y Facebook, como consecuencia de las medidas de seguridad exigidas por la nueva normalidad y que animará a los participantes a grabar un vídeo mojándose literalmente en una piscina, ducha, etc… o “mojándose” simplemente a través del apoyo y la colaboración. Ambas propuestas podrán enviarse al correo info@ademcvillalba.com para que puedan ser publicados en las redes sociales de la asociación o publicarlos directamente en las redes de cada uno etiquetando a la asociación con @ademcvillalba para Instagram o en @AdemColladoVillalba en Facebook.
Conciación social
La jornada, organizada por la Asociación de Esclerosis Múltiple de Collado Villalba, además de solidaridad, persigue aumentar la visibilidad y la concienciación social acerca de la Esclerosis Múltiple y de las personas que conviven con ella, así como de las necesidades asistenciales y la limitación en los recursos sanitarios disponibles. Esta iniciativa cuenta con la colaboración especial de Jesús Fernández y Leonor Villazala, representantes de la asociación en Guadarrama y la Concejalía de Sanidad del Ayuntamiento de Guadarrama.
Una ocasión especial este año, que sigue necesitando de la colaboración de todos, por lo que los donativos con los que se quiera colaborar se podrán depositar en la cuenta corriente ES69 2100 5538 1602 0007 1562, perteneciente a la asociación ADEM Collado Villalba.
La Esclerosis Múltiple es la enfermedad neurológica más frecuente entre los jóvenes adultos, siendo diagnosticada habitualmente entre los 18 y los 35 años. Esta enfermedad crónica, que afecta más a mujeres que a hombres, puede dar lugar a secuelas que limitan la calidad de vida de las personas que la padecen.
