Floorball El Escorial, orgullo de la Villa a golpe de stick

El pasado 26 de mayo, un abarrotado Pabellón de Navaarmado asistió a la apoteosis del Club Floorball El Escorial, que se proclamó campeón de la Liga Nacional al derrotar por 4-2 al CUF Leganés, histórico dominador en España de un deporte nacido en los años 60 en Estados Unidos y desarrollado años después en los países más septentrionales de Europa, básicamente para que los jugadores de hockey sobre hielo tuvieran la opción de practicar en las épocas estivales. El incipiente deporte del stick en sala sin patines es desde hace años un verdadero boom en la Villa, pues el gran triunfo en la liga española llevó a la clasificación del equipo para la Euro Floorball Challenge, la competición europea cuyo campeón obtiene el pasaporte para la selecta Champions Cup, el torneo bienal del que sale el campeón de Europa y en el que compiten de forma directa los campeones de liga de los países con más historia y potencial: Finlandia, Suecia, Suiza y la República Checa. El pasado mes de agosto, el Floorball El Escorial irrumpió en la Euro Challenge dominando su liguilla por delante del favorito, el Utrecht, y cayendo contra pronóstico en semifinales por 3-4 con los madrileños del CDE El Valle. 

floor ball 1
Imagen de un entrenamiento en el polideportivo de Navaarmado / Fotografía: R. Herrero

La decepción en ningún caso empañó la temporada del primer título nacional absoluto, un éxito que no se entendería sin la hornada de jugadores escurialenses que han sido forjados por el club desde la infancia, a caballo entre la pista del Pabellón de Navaarmado y las instalaciones del cercano Colegio Felipe II. Allí, dos de sus profesores, Juan Antonio Roldán y Carlos López, inculcaron en los alumnos la práctica del floorball -o unihockey, en el ámbito escolar-, con tal éxito que la salida natural no sólo fue la de crear un club, sino formar y desarrollar una estructura que hoy aglutina a más de 100 jugadores de todas las categorías, desde de los prebenjamines a los sénior, y que es un referente nacional gracias a la labor de sus dos grandes promotores: Roldán, además de presidente del club, es el máximo mandatario de la Asociación Española de Unihockey-Floorball y el seleccionador español absoluto; y Carlos López, el otro gran impulsor del Floorball El Escorial, es miembro de la International Federation Floorball (IFF), el máximo organismo mundial de un deporte del que es asiduo practicante, además de padre de Pablo y Charly, ambos internacionales con España.

El Escorial, referente nacional

Carlos López es un ejemplo para entender hasta qué punto el floorball puede calar en un pueblo como El Escorial, y erigirse casi en un modo de vida para decenas de familias de la Villa. Su caso es paradigmático: un profesor de inglés del Felipe II que tiene dos hijos en el centro y decide seguirles en su afición por el floorball, hasta el punto de orientar hacia este deporte la vida familiar durante los 12 meses del año. “Mis hijos eran alumnos de Juan Antonio en sus clases de Educación Física, y uno trata de ser buen padre: cuando tus hijos te piden jugar a una cosa, pues vas. Y cuando uno tiene tendencia a colaborar en las cosas en las que uno se implica, pues llega esto. Es un deporte que nos ha enganchado. Somos una ‘Familia Floorball’. Desde que mis hijos entraron en 2002, mis vacaciones han sido llevarles a campus en el extranjero, o si no, era dinero para ir con la selección. En vez de ir aquí a un campamento de verano, íbamos allí, a Suiza o a Suecia, a campus con floorball. Y, mientras mi mujer y yo hacíamos turismo, ellos pasaban 15 días jugando y viendo floorball”. Hoy, sus dos hijos, Pablo y Charly López, no sólo son dos piezas clave en el CUF El Escorial, sino también de la selección española absoluta. No son los únicos en la Villa, y por eso, cuando echa un vistazo general al equipo campeón de Liga y con hasta diez internacionales con España, a Carlos López le emocionan los recuerdos: “Hemos visto a los chicos del sénior A de pequeñitos, como alumnos de seis o siete añitos. A mí me emociona. Cuando ganamos la Liga, me costó mucho no dar el espectáculo, llorar… Fue muy bonito verles jugar, ver allí a los padres que has tenido como padres de alumnos, ver el Pabellón que se pone a reventar… Es una maravilla”.

floorball
Plantilla que logró el título nacional el pasado mes de mayo / Floorball Escorial

La consecución de la Liga Nacional el pasado mes de mayo fue una guinda para el pastel de la evolución que ha experimentado el Floorball El Escorial desde su fundación en 2002, cuando Juan Antonio Roldán decidió dar el paso de crear el club escurialense animado por el padre de unos alumnos suyos que habían practicado el floorball en el  Centro Cultural Dotacional Integrado de Arganzuela, una de las cunas de este deporte en Madrid. 16 años después, El Escorial cuenta con ocho equipos y más de 100 jugadores, unos 60 de escuela y algo más de 40 repartidos entre los tres sénior, dos masculinos y uno femenino, y el cadete mixto. 

En 1998, apenas cuatro años antes de la fundación del Floorball El Escorial, se había creado la Asociación Española de Unihockey-Floorball, por lo que se puede  establecer cierta correlación. Juan Antonio Roldán, en su calidad de presidente del Floorball español, cifra el volumen de jugadores federados “entre 800 y 850 licencias en España, repartidas en algo más de 30 clubes. La mayoría es cierto que están en Madrid, pero tenemos clubes en otras provincias, como Alicante o Barcelona, también en Andalucía o Asturias. Y luego hay clubes que han surgido y han estado un tiempo tratando de salir adelante, como un grupo de 15 ó 20 personas que habían creado un club en Ciudad Real, ellos solos. Nosotros les tratamos de ayudar desde aquí, pero normalmente esas aventuras duran pocos años, aunque haya excepciones como Fuengirola, donde llevan jugando más de 15 años”.

Objetivo, la difusión 

La descripción del presidente habla de un deporte con camino por recorrer e inmerso aún en la fase inicial de su expansión a nivel federado, aunque todo sea muy distinto en cuanto a su arraigo y popularidad en los centros escolares. “Si yo en mi clase de Educación Física les doy a elegir y les digo que hoy podéis jugar a lo que queráis, el 80% de los chicos me piden un stick, porque es súper divertido y atractivo. Prácticamente en todos los colegios de España hay sticks y bolitas con agujeros, desde que el floorball llegó a España a finales de los 90. Cuando hablo con la gente, todo el mundo lo conoce, pero el problema que tenemos es de difusión: muy poca gente sabe que existe una Asociación Española, con sus competiciones, con su selección nacional que lleva compitiendo más de 15 años por Europa y por el mundo. La gente sigue pensando que es un deporte muy divertido, que sirve para que los chicos se lo pasen estupendamente en las clases de Educación Física, pero de ahí, falta un salto”. Juan Antonio Roldán cita varias de las claves que pueden llevar al floorball hasta el gran público: “Llevamos tiempo peleando por algún tipo de reconocimiento oficial por parte del Consejo Superior de Deportes (CSD). Entendemos que puede ser un punto de inflexión de cara a obtener más visibilidad. Ese paso no se da, digamos que por circunstancias político-burocráticas. Y nosotros, con los escasos recursos que tenemos, tratamos de hacer esa difusión. La realidad es que en Madrid es un deporte asentado, con competiciones en todas las categorías desde hace más de 15 años, y peleamos por establecer el floorball en otras zonas de España, que es una de las demandas del CSD. Y estamos en ello, pero no tenemos ninguna ayuda oficial, todos los ingresos nos vienen de los clubes y los jugadores, y así es complicado coordinar una difusión del floorball, por ejemplo en Barcelona, desde Madrid”.  

presidente
Carlos López, uno de los impulsores del club escurialense y miembro de la International Federation Floorball (IFF) / Fotografía: R. Herrero

 Juan Antonio Roldán lleva más de una década dirigiendo combinados nacionales y, desde hace seis años, es el seleccionador absoluto. Bajo su dirección, España se quedó a un solo gol de entrar en el Mundial. “A pesar de la poca cantidad de jugadores y clubes que tenemos, estamos peleando con los mejores del mundo, cerca del top ten. En ese clasificatorio nos quedamos fuera por golaverage, acabamos empatados a puntos con equipos que fueron al Mundial. Pensamos que hubiera sido un punto de inflexión, como ocurrió por ejemplo con los éxitos de Carolina Marín y el bádminton, que empezó a hacerse popular y a salir en televisión. Algo de ese tipo esperamos, porque creemos que cuando nos clasifiquemos para el Mundial, que será más pronto que tarde, tendremos ese punto de inflexión. Pero nunca se sabe, porque no depende de nosotros”.

Roldán sitúa otra clave en el ámbito administrativo: “La Asociación Española de Floorball está registrada en el CSD como asociación deportiva. En su día eso ocurrió al amparo de la Federación de Hockey sobre Hierba, sólo que pasados unos años ellos decidieron romper ese acuerdo que teníamos de forma unilateral, aunque era un apoyo sobre el papel, más que otra cosa. El floorball tiene más similitudes o más transferencias técnicas con el hockey sobre hielo, que en España es muy minoritario, no llega a tener Federación y está integrado en la de Deportes de Invierno. Eso es un inconveniente, porque los países en los que más se ha desarrollado el floorball son aquellos en los que el hockey sobre hielo es muy fuerte. ¿Por qué? Porque los jugadores de hockey sobre hielo lo utilizan durante el verano como una forma de mejorar su técnica, y también porque es más barato: es un stick, unas zapatillas y a correr. Es una de las ventajas que tenemos”.                         

Quien esté acostumbrado sólo a leer sobre fútbol u otros deportes mayoritarios se verá sorprendido por algunos datos que van más allá del amateurismo al uso. Un ejemplo es el hecho de que hasta los propios jugadores internacionales deban pagarse sus viajes con la selección, algo que en algunos casos llega a condicionar las convocatorias, también en combinación con obligaciones personales relacionadas con los estudios o los trabajos. Tanto Juan Antonio Roldán como Carlos López hablan de “inversión personal” para referirse a ello, y cifran entre 2.000 y 3.000 euros anuales lo que le puede costar a un jugador atender a la vez sus gastos en un club de liga nacional y las llamadas de la selección española. En el caso de un internacional asiduo, el mínimo son las cuatro concentraciones que equivalen a las cuatro ventanas internacionales habilitadas  cada año para jugar los partidos amistosos, que la Asociación Española trata de organizar en países cercanos. Y es ahí donde aparece otro cortapisas para el crecimiento, pues el nivel de países limítrofes, como Francia o Portugal, es inferior al de España, y la selección tiene mucho más difícil viajar a los países que albergan a las grandes potencias, que son  Chequia, Finlandia, Suiza y Suecia. “No poder medirnos con los mejores para evolucionar más rápido es otro de nuestros problemas”, zanja Roldán.

floor ball 2

Implantación a nivel comarcal  

El deporte del floorball no es hoy cosa exclusiva de El Escorial, sino que tiene una implantación en la Sierra muy importante a nivel escolar, y está evolucionando de forma significativa a nivel federado. La gran referencia fuera de la Villa está en el vecino Real Sitio, donde el Club Fénix San Lorenzo tiene a su equipo sénior también en Liga Nacional y con varios internacionales en sus filas. Carlos López explica que “el centro del Floorball en Madrid estaba en la zona de Leganés, y nosotros teníamos claro que necesitábamos crecer también comarcalmente. Por eso ayudamos en la creación de las escuelas de San Lorenzo y Guadarrama, que están muy bien y crecen a buen ritmo. Queremos seguir plantando esa semilla y regándola en más municipios, como Collado Villalba,  Galapagar, incluso en Navacerrada”. El firme crecimiento del Fénix San Lorenzo, actual tercer clasificado de la Liga y poseedor de varios títulos nacionales de base, alimenta una sana rivalidad, escenificada en los duelos de Navaarmado y El Zaburdón. Carlos López desvela que “muchos jugadores son amigos, han crecido deportivamente aquí y ahora están en el otro club”; y Juan Antonio Roldán añade que  “es habitual la transferencia de jugadores de un sitio a otro”. Hace unas semanas, ambos equipos se enfrentaron en Navaarmado ante un pabellón lleno, y con público no necesariamente seguidor de los dos clubes, como apunta Carlos López: “Viene mucha a gente a vernos, pero también a ver el partido en sí, desde sitios como Leganés”. El titular de la ciudad del Sur, el CUF Leganés, no sólo es el gran rival de El Escorial por el título de Liga, sino que es el gran transatlántico del floorball español, con 14 entorchados nacionales consecutivos, un palmarés interrumpido el pasado 26 de mayo. Y fue ante el Floorball El Escorial, el club que enorgullece a los caciques a golpe de stick.      

Fernando García: “Trabajo con jugadores de un talento descomunal, así que todo es más sencillo” 

Fernando García es el entrenador del Floorball El Escorial. El suyo es un caso excepcional, puesto que hasta hace menos de tres años su carrera estaba en el fútbol: era el entrenador encargado de sostener al CD Galapagar en Preferente, tras el brillante ciclo de David Muñoz, pero su dirección técnica nació condicionada por las bajas de jugadores importantes y no pudo evitar el descenso en la última jornada. Como ex jugador y técnico de muchos años en el club galapagueño, el golpe fue muy duro en aquel mes de junio de 2016, pero un viaje a Oporto para ver jugar a su hermano Borja en el Mundial Universitario de Floorball lo cambió todo.

entrenador 1
Fernando García, entrenador del Floorball Escorial / Fotografía: R. Herrero

García explica que “yo había visto muchos partidos de floorball, porque mi hermano lleva jugando aquí quizá desde 2008 ó 2009. La deformación profesional de entrenar te lleva a caer en preguntarle por todo: jugadores, métodos de ataque, de defensa… Te metes en la dinámica de tratar de entender el juego. Además, se habla de floorball en cada comida familiar. Tras la destitución en Galapagar, pasa el mes de junio y me encuentro en un momento en el que tengo alguna llamada para entrenar que no me acaba de convencer, y aparece el Mundial Universitario, al que iba mi hermano con mis padres, además de jugadores como Juan Bernardino o Duncan Quinlan. Mis padres me dijeron que por qué no iba a pasar unos días, porque estaba dándole vueltas a qué hice bien y qué hice mal, como hacemos los entrenadores. Me llevé una mochila con ropa de deporte. Donde jugaban ellos había un pabellón y, afuera, había una pista de atletismo. Fui con idea de correr allí, saltar a la comba, porque por aquel entonces estaba haciendo crossfit. Recuerdo que tras entrenar me duchaba y me metía a ver los partidos. Es a lo que fui a Oporto, sin ninguna pretensión de buscar nada, en mi cabeza no estaba eso. A Carlos López lo conocía de El Escorial de veinte mil cosas. Entonces, Víctor Sánchez, el anterior entrenador del Floorball El Escorial, se había ido a vivir fuera, y no recuerdo exactamente en qué punto me convenció Carlos. Hablamos, pero es él quien mejor lo puede decir”.  El aludido explica que “tocamos su corazoncito”. “Yo no conozco el mundo de otros deportes, pero le dimos todo el apoyo y toda la confianza, y le dijimos: tú tienes conocimiento de gestión de equipo. ¿Qué te falta? ¿lo específico, el reglamento? Pues ahí estoy yo, a tu lado como una lapa, no te preocupes”. 

A partir de ahí, Carlos López se puso a la tarea y así lo recuerda Fernando García: “Me aportó ciertos DVD’s, con temas de arbitraje, de técnica individual, temas de táctica individual y colectiva… Luego, tiré de lo que conocía, también de vídeos de Youtube, que es maravilloso para estas cosas. Ese curso acelerado lo hice también con Alfonso Martín, que está con nosotros de preparador físico y ha sido además alumno de Carlos y Juanan. Recuerdo que era un cursillo casi telefónico. Alfon y yo estábamos cada uno en su casa conectados al Youtube, y hablábamos, le hacía preguntas sobre todo. Tengo una libreta en la que tengo apuntadas conversaciones de esos días, cosas sobre cómo contextualizar la fuerza dentro del entrenamiento en pista, cómo hacerlo fuera… Cosas que nos sonaban a chino”.

floor ball 3 (1)

Fernando García recuerda lo que le dijo a los jugadores el primer día de entrenamiento: “Mirad: yo el palo éste no lo he cogido en mi vida, no os voy a engañar. Pero creo que tenemos otras virtudes para que podamos tirar para adelante”. Ese pasaje de la historia tuvo lugar a mes y medio vista del comienzo de la Liga, programado nada menos que ante el Fénix San Lorenzo en El Zaburdón. “Llegamos a puerta gayola, sin partidos de pretemporada, con falta de experiencia, aunque muy bien asesorado por Carlos. Llegamos empatados a dos goles al segundo descanso, y acabamos ganando 2-5. La curiosidad de ese partido fue que tres jugadores que yo había dejado fuera se incorporaron a mitad de partido y de ahí hasta ahora han tenido una trayectoria buenísima. Uno de ellos fue Dani Guzmán, que es el capitán de la selección española sub-19”.

Talento internacional

Fernando García otorga un papel clave a su predecesor en el banquillo, Víctor Sánchez. “Sería injusto no hablar de él y decir que todo es cosa nuestra. Los jugadores venían con una pila de años entrenados con Víctor, venían de un aprendizaje desde la ascendencia que Víctor tenía sobre ellos, porque él había sido jugador de la selección española, porque muchos de los jugadores que hoy tenemos como estandartes del primer equipo eran recogepelotas en el Clasificatorio que se jugó en el Escorial en 2010 y le veían jugar; y porque, luego, Víctor fue su entrenador. Creo que cojo algo que ya quisieran muchos, sea el deporte que sea. Trabajo con un talento descomunal, y así todo es más sencillo. Hemos pasado también momentos malos, pero creo que todos vamos en la misma dirección”.

Para hacerse una idea, Fernando García maneja un equipo que es más de la mitad de la selección española absoluta, descontadas las contingencias que puedan existir en cada convocatoria por los condicionantes inherentes al deporte puramente amateur. En la última lista de Juan Antonio Roldán para el Clasificatorio del Mundial que se jugó en Bratislava, el Floorball El Escorial aportó seis jugadores: los hermanos David y Andrés de la Cuesta, Miguel Vizcaíno, Borja García, Pablo López y el polifacético Duncan Quinlan, jugador de 22 años y ascendencia estadounidense, que presenta una tarjeta de 70 goles anotados en 88 partidos. A este sexteto pudieron sumarse Juan Bernardino y Charly López, que se quedaron fuera a última hora, por lo que Fernando García considera además que “los 12 jugadores que tenemos en Liga Nacional pueden ser internacionales. Tanto nuestros porteros, como los que tenemos en cualquiera de las dos líneas pueden hacer buen papel en cualquiera de las selecciones”. En el apartado de las internacionalidades del Floorball El Escorial también hay que incluir a cuatro jugadores sub-19, algunos ya con un papel importante en la Liga Nacional, como Dani Guzmán y Mario Caballero, y los porteros Diego y Beltrán Mondéjar, que se abren paso en el Sénior B.   

floorball30
Los integrantes del equipo sénior, celebrando el título nacional con jugadores benjamines y prebenjamines / Fotografía: E. Peñas

En busca de la segunda Liga    

Son los nombres propios del vigente campeón español, que ha arrancado este curso como líder al pleno de puntos de la Liga Nacional: hasta ahora, el Floorball El Escorial se ha impuesto en sus dos salidas, por 0-16 ante los asturianos del Lena Floorball, y por 1-5 en la pista del CDE El Valle, además de ganar en Navaarmado por 9-2 al Fénix San Lorenzo y reeditar ante el CUF Leganés el 4-2 que le dio en mayo el título de Liga, para dejar a su máximo rival cuatro puntos por debajo. Como quiera que el Grupo Único de Liga Nacional está formado por siete equipos, el liderato escurialense parece sólido, a falta de afrontar a partir de enero el segundo tramo de la competición, con la devolución de visita al Leganés y al Fénix San Lorenzo, dos equipos que este domingo 4 de noviembre se enfrentan en El Zaburdón.

El objetivo del Floorball El Escorial es ganar por segunda vez la estatuilla del medio stick que acredita al campeón de la Liga Nacional y pasar la frontera de las semifinales en la Euro Challenge. En el plano nacional, Fernando García define al gran rival, el CUF Leganés, como “el equipo que yo creo ha motivado nuestra evolución. Verle todos estos años levantar trofeo tras trofeo ha hecho que digamos: yo también quiero”; y sobre el gran sueño europeo, el entrenador sitúa el primer objetivo en sacarse la espina de lo sucedido el pasado mes de agosto en la semifinal de la primera fase de la Euro Challenge, ante el CDE El Valle, saldada con derrota por 4-5 tras ir ganando 2-0: “Quizá pagamos el exceso de confianza, tras haber hecho lo más complicado, que fue meternos como primero grupo por delante del Utrecht, con el que empatamos y al que superamos por golaverage. Nos vimos tan bien en la liguilla que, al ver el cruce con El Valle, al que habíamos ganado en todos los partidos anteriores con resultados amplios, cometimos un error de infravalorar al rival. Inconscientemente nos vimos en la final, y el responsable fui yo. Creo que esa noche me acosté en el hotel pensando en a quién iba a poner en la final contra el equipo húngaro. Fue un error del que hay que aprender”. Subsanarlo es el primer paso para conseguir enfrentarse a los grandes de Europa, algo que pasa por ganar las dos fases de la Euro Challenge para coronarse campeón y obtener así la plaza para competir en la Champions Cup, con los mejores de la República Checa, Suecia, Suiza y Finlandia, y medirse, por qué no, al vigente campeón: el IBF Falun sueco.

Jaime Fresno

floorball2

Send this to a friend