Lucía Rodríguez apunta a la San Silvestre Vallecana: “Hay que acabar el año arriesgando y a lo grande”

Lucía Rodríguez volverá a ser la gran protagonista en el Fin de Año del atletismo serrano en la San Silvestre Vallecana, una vez confirmadas las suspensiones de pruebas relevantes de la comarca, como la San Silvestre Villalbina o la Carrera de Navidad de Cercedilla, o el hecho de que la decana de la Sierra, la San Silvestre de Galapagar, se dispute durante diez días vía aplicación de móvil, a fin de evitar las aglomeraciones de atletas -cada uno puede elegir el momento en que hace el recorrido activando un geolocalizador-, y de cumplir con las normas de seguridad de los protocolos de la Covid-19.

Vallecas ha adoptado también esa fórmula en su versión popular, que a primeros de esta semana ya había superado los 30.000 inscritos, y ha logrado sacar adelante una versión convencional de la Internacional, restringida a 500 atletas, con 250 hombres y 250 mujeres, y reservando 60 plazas en cada carrera para corredores de élite. Es ahí donde ha entrado por derecho propio Lucía Rodríguez, que el pasado 26 de noviembre volvió a estar en la presentación de la Vallecana compartiendo focos, entre otros, con el fundador de la carrera, Antonio Sabugueiro -vecino de Collado Villalba- y Fernando Carro, compañero de entrenamientos de la sanlorentina y gran referente actual en el fondo español, tras establecer en Alcobendas el récord de España oficioso -no fue homologado por la diferencia de altitud entre la salida y la meta- en los 10 kilómetros en ruta.

Carrera “mágica”

Lucía se refiere a la Vallecana como “una magia de carrera”, algo sobre lo que ya incidió en la presentación, con el recuerdo de su extraordinaria actuación del año pasado, cuando fue la segunda española en meta con un sensacional registro de 32:50 minutos en los 10 kilómetros del recorrido clásico, a sólo cuatro segundos de Irene Pelayo, la mejor nacional. Ese rendimiento fue entonces la constatación de un salto en sus prestaciones en competición que luego le llevó a cosechar excelentes resultados, de ahí el optimismo de la sanlorentina.

“El año pasado nunca me planteé que pudiera hacer esa marca, y no creo que fuera por cambiar de entrenador, sino porque ya lo tenía en mis piernas. Salí despacio, con una compañera, y luego son las sensaciones las que te van llevando. Me vi delante y, cuando un hombre me dijo que iba a segunda, me crecí, también porque en Vallecas hay mucha animación. No sé si este año, sin la gente y corriendo pocas atletas, seré capaz de encontrar esa motivación, pero este año la mentalidad es la de luchar al máximo. Hay que acabar el año arriesgando y a lo grande”, dice la atleta gurriata del Nike Running.

La San Silvestre Internacional Vallecana será, si no hay cambios imprevistos de última hora, la carrera que sacará del parón de competiciones a Lucía Rodríguez, tras sus excelentes participaciones en los campeonatos de España de pista, con el broche final de la medalla de bronce nacional obtenida en los 1.500 metros absolutos de Vallehermoso, allá por mediados de septiembre.

La atleta, pese a los dos meses sin competir, dice estar “tranquila, aunque al acabar la temporada en pista, y aunque ya sabía que no iba a haber ningún cross, no te esperas que no haya nada. Ha habido alguna carrera, pero yo no he podido entrar”. Lucía explica que las especiales circunstancias de la temporada no le han afectado en la mentalidad: “No he sentido frustración por no correr, porque me gusta mucho entrenar y he empezado a doblar sesiones, aunque acabara cansada con todos los kilómetros que he hecho: en una semana de descanso he llegado a hacer 120, cuando hace un año corría 80. Cuesta asimilarlo y es agotador, pero me gusta. Mi mentalidad debe ser más profesional, por eso, si el año pasado fui segunda, en éste tengo que salir al máximo”, dice.

Incógnita con el circuito

La San Silvestre Vallecana decidió en principio apostar por un circuito de 2,5 kilómetros en las inmediaciones del estadio Santiago Bernabéu, al que los atletas deberían dar cuatro vueltas. Sin embargo, la organización decidió cambiar, ante las opiniones contrarias a sacar la carrera de Vallecas, y diseñó un nuevo circuito, también de 2,5 kilómetros, en los aledaños de las instalaciones de la Fundación Rayo Vallecano, junto a la zona del Ensanche.

La prueba élite femenina saldrá a las 18:30 horas con 250 participantes, si se cubre el cupo que exige que todas las corredoras acrediten marcas por debajo de los 40 minutos. Lucía Rodríguez admite que “aún no he mirado el circuito para no ponerme nerviosa, pero dicen que es bastante rápido. Al principio la idea era correr en La Castellana, pero luego lo cambiaron y no sé qué tal me vendrá, pero me apetece mucho hacerlo bien. Está claro que va a ser muy diferente. El año pasado motivaba mucho la gente, pero me asusta un poco pensar cómo será sin público, sin luces, sin la música que ponen… No sé cómo se gestionará”.

Con Fernando Carro

Lucía Rodríguez no sólo presentó la Vallecana con Fernando Carro, con el que comparte entrenador, sino que suele coincidir en sesiones con el atleta madrileño, subcampeón de Europa de 3.000 metros obstáculos en 2018. De él dice que “siempre me intenta motivar diciéndome que tardó mucho en sacar a la competición todo el trabajo de los entrenamientos, y eso es algo que me motiva, porque, como él, he trabajado mucho en la sombra. Fernando transmite mucha paz y da la sensación de que aprendes de él, pero también él de mí. Sientes esa reciprocidad”. Lucía recuerda que la mañana en la que Fernando Carro se erigió en el atleta español más rápido en los 10 Kilómetros en Ruta “yo iba a entrenar, pero sabía que la de Alcobendas era como su carrera. Lo vi por la tele y me generó tal motivación que me entraron ganas de salir a correr más”.

La sanlorentina vuelve a incidir en el cambio de mentalidad que ha experimentado desde que empezó a entrenar a las órdenes de Arturo Martín: “Mentalmente necesitaba el cambio, además Arturo es una persona muy positiva que anima con sus comentarios, que nunca son negativos. Además, antes no era tan constante, y siento como que es ahora cuando estoy empezando el atletismo. Se trata de seguir mejorando, y creo que en un tiempo saldrá mi mejor versión, porque además tengo muchos apoyos y ayudas”.

La atleta serrana se ha tomado un respiro en los entrenamientos de la Residencia Blume de Madrid pasando unos días con su familia en San Lorenzo de El Escorial. Tras el brote de coronavirus detectado en una sala de artes marciales, la situación en el Centro de Alto Rendimiento se estabilizó y los entrenamientos de Lucía han transcurrido con normalidad, dentro de las restricciones del protocolo aplicado en la instalación sobre el Covid-19, que incluye los test de antígenos obligatorios para los deportistas en su entrada al centro. 

Jaime Fresno