La derrota en Aravaca (1-0) no impide que el Galapagar pueda rematar el sueño del playoff en El Chopo
El Galapagar se dejó su racha de seis jornadas sin perder en el Antonio Sanfiz, donde cayó el Jueves Santo por la mínima ante el Aravaca (1-0), y perdió el colchón sobre el sexto clasificado, un Las Rozas que le empató a puntos con su victoria del domingo sobre el Tres Cantos. Las tres últimas jornadas decidirán si el cuadro serrano juega el primer playoff a Segunda RFEF de su historia, un sueño que estará muy al alcance si los galapagueños sacan adelante los dos partidos seguidos que tienen en El Chopo, ante el Trival Valderas, este domingo a las 16:30 horas, y frente al Cala Pozuelo, en una penúltima jornada que ya se va a disputar en el horario unificado de las 11 y media de la mañana.
El equipo de Javi Zamorano, que aguanta en la quinta posición ahora igualado a 50 puntos con Las Rozas, pierde el margen de error de cara a los tres últimos partidos, pero tendrá la oportunidad de alcanzar el histórico objetivo si saca adelante sus dos citas consecutivas en El Chopo ante el Trival Valderas y el Cala Pozuelo
El equipo de Javi Zamorano no tuvo la pegada necesaria para puntuar en el Antonio Sanfiz, un campo de reducidas dimensiones donde el Aravaca se suele hacer fuerte con el juego directo y las acciones a balón parado. El conjunto de Miguel Madrid, acuciado por el descenso, puso el listón muy alto en cuanto a intensidad y se hizo fuerte a raíz del gol de Jony en el arranque de la segunda parte, que llegó en un disparo desde fuera del área que rebotó en un defensor y resultó inapelable para Pascu. El Galapagar, con casi todo el segundo tiempo por delante, trató de sobreponerse, pero entre la actuación del guardameta Bazaco y la falta de definición se quedó sin puntos que hubiesen sido fundamentales de cara al objetivo.
El portero local desbarató un gran disparo de Gonzaga Suárez, a los pocos minutos de que el canterano sustituyera a Figueroa para la media hora final, y tanto More como Marcos Gil tuvieron opciones para que el Galapagar rescatara al menos el empate. Sin embargo, el gol no llegó y el Aravaca entró en el tramo final de partido aprovechando los intentos serranos a la desesperada para acercarse al gol de la sentencia. Javi Zamorano, que contaba con bajas importantes como las de De la Torre o Javi Redondo, apostó por cargar el ataque con todas las armas al alcance, incluido Rafa Vega. El goleador del filial tuvo la última oportunidad, ya en el tiempo añadido, pero el 1-0 fue inamovible y dio al Aravaca tres puntos clave para salir momentáneamente del descenso directo.
Jaime Fresno
