En nombre de todas/os los perreros de Villalba y alrededores

En nombre de todas/os los perreros de Villalba y alrededores:

Tenemos la suerte de tener uno de los espacios para perros más grandes de la Sierra y está más abandonado que ninguno que hayamos visto. Y no solo el pipí can ubicado junto a la piscina municipal, sino también los que se encuentran dentro del Coto de las Suertes.

Si hay algo extremadamente peligroso para un animal desde la primavera y hasta bien entrado el otoño, son las espigas. Este elemento aparentemente indefenso, son como cuchillos para nuestros amigos peludos, que les provocan abscesos de todo tipo, heridas, graves complicaciones en oídos, ojos y pulmones, etc. Solo con dar un paseo por los veterinarios de la zona, podrán comprobar que tienen miles de casos al mes por este problema. Yo misma he tenido que acudir a urgencias dos veces en el último mes por llevar al perro al pipí can y encontrarme con dos graves infecciones en cuello y oído. He escuchado ya en el último mes de casos de cirugías muy complejas en ojos y pulmones.

No tiene sentido que paguemos impuestos por tener zonas de este tipo y que estén completamente dejadas. Se han limitado a cortar la hierba y dejarla tirada a que se seque en el mismo lugar. No se rellenan huecos y ni siquiera la entrada que tiene dos socavones que con las lluvias se inundan y hacen imposible hasta acceder. Y para rematar cortaron el acceso por la calle principal, poniendo candado a la valla.

Es como tener varios palacios completamente en ruinas, ¿qué sentido tiene?

Elena P.

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