El PP se reencuentra con la victoria en Guadarrama tras dejarse APPG dos concejales por la entrada de Vecinos
12 años después, el PP ha vuelto a ganar las elecciones municipales en Guadarrama, no tanto por crecimiento propio (en realidad pierde un punto respecto a 2015, aunque mantiene los cuatro concejales que tenía) como por el desgaste de APPG, el partido de la alcaldesa, Carmen María Pérez del Molino, que se deja 10,5 puntos y dos ediles, quedándose también con cuatro, igual que los populares, aunque con casi 200 votos menos (1.487 frente a 1.672). Su caída alimenta la entrada en el Ayuntamiento de Vecinos por Guadarrama, formación a la que APPG puso en la diana durante la campaña y que, liderada por el concejal José Ramón Culebras (ex de Vox), se estrena con un 15,19% y tres representantes. También tres suma el PSOE, uno más que en 2015 -con un 17,33%, cinco puntos más que en 2015-, aunque la suma a la izquierda es matemáticamente imposible, ya que Unidas Podemos pierde dos ediles para quedarse sólo con uno (8,46%). La Corporación guadarrameña se completa con Vox, que crece en porcentaje respecto a los últimos comicios municipales (9,16%, dos puntos y medio más que en 2015), aunque sin que eso suponga aumentar su representación (un concejal); y con la entrada de Ciudadanos (6,57%), con un edil.
Así las cosas, las fuerzas de centroderecha tienen una amplia mayoría, aunque deberán llegar a acuerdos para formar gobierno, pacto que no fue posible en 2011 y 2015, entonces con APPG como primera fuerza y el PP en segundo lugar. Ahora, con los papeles intercambiados, la incógnita está en saber cómo se resolverá la ecuación y si entran en juego otras formaciones, toda vez que Vecinos aseguró en la campaña que no pactaría con nadie.
