Feria taurina de Guadarrama: otra gran novillada de Montealto y triunfos de Leo Valadez, Ángel Sánchez y Alejandro Marcos
La feria taurina de Guadarrama terminó el miércoles con la tradicional novillada sin picadores organizada por la Hermandad de San Francisco de Asís, en este caso con el apoyo de Taurodelta. Se lidiaron utreros del Montencillo, bien presentados y de buen juego (los mejores 1º, 5º y 6º), para Alejandro Rodríguez (Fundación El Juli), palmas y vuelta al ruedo; Alberto Martín (escuela de Colmenar Viejo), palmas y palmas; y Alejandro Adame (Escuela de Madrid), que fue el más destacado de la terna, cortando una oreja a cada uno de sus oponentes. Adame protagonizó una actuación muy sólida, mostrándose con mucha capacidad y firmando lo mejor de la tarde, informa Alfredo Fernández.
Antes, en la primera novillada de la feria, celebrada el 29 de septiembre, festividad de San Miguel, se lidió una floja novillada de La Quinta. Alejandro Fermín tuvo pocas oportunidades para el lucimiento, dando la vuelta al ruedo en su primero y siendo silenciado en el segundo de su lote. Tampoco pudo hacer gran cosa Jesús Martínez (silencio en ambos), mientras que el mexicano Leo Valadez sorteó los ejemplares más potables del encierro. Ante su primero se mostró firme, y con el último de la tarde toreó con templanza y supo aprovechar la duración de su oponente, con varias series a buena altura. Mató de una gran estocada, lo que fue definitivo para que cortase las dos orejas, saliendo a hombros por la puerta grande.
En la segunda feria se lidió una desigual novillada de El Montecillo, con Ángel Sánchez como triunfador de la tarde, tras cortar dos orejas a su segundo, con el que estuvo muy firme. En el primero realizó una labor voluntariosa, aunque el novillo acusó falta de raza y no terminó de romper. Rafael Serna tuvo que pechar con el peor lote, destacando en cualquier caso la faena a su segundo, con una actitud encomiable y deseos de gustar a su paso por Guadarrama. Mató bien y cortó una oreja. Finalmente, el novillero de Morazarzal Pablo Mora firmó una actuación de mucho mérito, con temple y largura en los muletazos. Pudo tocar pelo en su primero, pero falló a espadas; en cambio, con el segundo sí estuvo acertado con el acero, llevándose un trofeo de esta feria de San Miguel.
Lo mejor del ciclo llegaría en la tercera novillada picada, celebrada el domingo y en la que los novillos de Montealto estuvieron de nuevo a gran nivel en Guadarrama. Hubo petición mayoritaria de indulto a “Camagueto”, lidiado en cuarto lugar por Alejandro Marcos, aunque el presidente, ateniéndose al reglamento, decidió no concederlo. Un ejemplar de enorme bravura, fondo y condición, que llegó a derribar al picador y al que el novillero entendió bien desde el principio, cuajando una gran faena. Pablo Aguado dejó buenos detalles ante los dos utreros que le correspondieron en el sorteo, con especial emoción en la faena a su segundo. Cortó una oreja a cada novillo. Finalmente, el francés Andy Younes sacó partido al fondo de su primero, con buenas tandas de muletazos, para acabar cortando una oreja. El mismo premio logró en el último de la tarde, arrimándose con decisión y matando de una gran estocada.
En definitiva, una feria con muchas notas de interés, triunfos para Leo Valadez, Ángel Sánchez y Alejandro Marcos -sin olvidar las buenas maneras de Adame en el festejo sin caballos- y, sobre todo, una nueva novillada de gran nota con el hierro de Montealto, que prorroga así su idilio con Guadarrama. A mediodía, los encierros por el centro urbano fueron seguidos por centenares en las calles de esta localidad serrana, que un año más ha apostado por la feria taurina como uno de los pilares de sus fiestas de San Miguel y San Francisco de Asís.
