Los Molinos celebra este fin de semana la Fiesta de la Vaquilla, declarada de Interés Turístico Regional

Después de que el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid declarara el pasado 6 de junio de 2017 Fiesta de Interés Turístico Regional la celebración de la Vaquilla de San Sebastián de Los Molinos, este va a ser el primer año que esta tradicional fiesta se celebre con este nuevo título. Y esto, unido a que se ha cumplido el 350 aniversario de la concesión a este municipio de otro título, el de villazgo, hace que las celebraciones de estas jornadas de fiesta, del 19 al 21 de enero, sean en este 2018 algo especiales.

vaquilla

Después de que el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid declarara el pasado 6 de junio de 2017 Fiesta de Interés Turístico Regional la celebración de la Vaquilla de San Sebastián de Los Molinos, este va a ser el primer año que esta tradicional fiesta se celebre con este nuevo título. Y esto, unido a que se ha cumplido el 350 aniversario de la concesión a este municipio de otro título, el de villazgo, hace que las celebraciones de estas jornadas de fiesta, del 19 al 21 de enero, sean en este 2018 algo especiales. Las actividades organizadas por la Hermandad de San Sebastián contarán nuevamente con una ronda por el pueblo la tarde del viernes 19, que acabará a media noche con los antiquísimos cánticos en la puerta de la iglesia y en la casa del señor cura, que al finalizar invitará a bollos y vino dulce a los presentes.

El sábado 20 de enero día de San Sebastián, es el día grande las fiestas, a las 12:00 h. se celebrará la misa solemne en su honor seguida de procesión, al finalizar esta la Hermandad invita a todos los asistentes a un aperitivo en su casa; a media noche tendrá lugar la primera suelta de la vaquilla y a continuación migas y vino tinto. El domingo 21 comienza temprano con la misa por los difuntos de la Hermandad, a mediodía la vaquilla dará su segunda vuelta por las calles del municipio y a las cinco de la tarde se soltará de nuevo en su último recorrido de este 2018, que terminará en la Plaza de España, donde se seguirá la tradición de ‘matar’ la vaquilla y ‘moler a garrotazos’ al alcalde de la hermandad, por ordenar la muerte de la vaquilla; al finalizar, los apeos se colgarán en el balcón del Ayuntamiento hasta que la hermandad salde todos sus gastos.

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